Bajo el lema “Dame de beber y saciaré tus anhelos de vida”, los jóvenes del Movimiento Juvenil Salesiano de Santiago se unieron a la tradicional peregrinación al santuario de Padre Hurtado, luego de haberse suspendido por la pandemia.
El recorrido se extendió desde el parque de los Reyes hasta el Santuario del santo. Contó con cuatro estaciones cuya temática resaltó el trabajo juvenil hacia las comunidades y parroquias, a la luz del Evangelio de Mateo “Cada vez que lo hicieron con uno de estos, mis hermanos más pequeños, conmigo lo hicieron”.
“Cristo está vivo, y queremos que los jóvenes salgan a compartir esta alegría, no solo marchando sino peregrinando por nuestro Chile, siendo para las comunidades signo de fe y esperanza”, comentó el P. Jonathan Muñoz, Vicario de la Esperanza Joven.
Los jóvenes del MJS junto a la banda de animación juvenil Caetera Tolle, animaron la segunda estación, proponiendo a los participantes mensajes de reflexión y cantos en relación al evangelio propuesto, incentivándolos a seguir con alegría y optimismo este recorrido luego de tres años en casa.
“Para nosotros es importante participar de esta peregrinación recordando la figura del padre Hurtado haciéndonos parte de la iglesia. Este año el MJS Chile se hace presente y queremos compartir nuestra espiritualidad, lo que significa para nosotros ser solidario al margen de nuestras vivencias”, aseguró el P. Juan Miguel Cárcamo, delegado inspectorial para la pastoral juvenil.
Con esta actividad, la Vicaría de la Esperanza Joven invita a los jóvenes de Chile a asumir un compromiso con sus diferentes comunidades y sociedad, siendo abrigo para aquellos que lo necesiten.
“Con esta peregrinación me queda claro que el abrigo que podemos dar como salesianos es el Espíritu de familia, esa alegría que nos caracteriza, y ese compromiso que podemos ofrecer y entregar a los demás, manifestando nuestro carisma heredado por Don Bosco y Madre Mazzarello”, agregó Sor Doménica González, delegada para la pastoral Juvenil de las Hijas de María Auxiliadora.
La iglesia de Santiago motiva a los jóvenes para que sigan favoreciendo diversas acciones solidarias que generen cambios reales en la sociedad, mirando a los demás con los ojos de Dios y repitiendo constantemente en el corazón: “cada vez que me encuentro con los otros ¿Qué haría Cristo en mi lugar?.
FUENTE: Comunicaciones Salesianos Chile
