Asamblea Inspectorial – Mons. Ezzati: “Soy un agradecidísimo hijo de Don Bosco”


Luego de la oración inicial, en la que se pidió al Espíritu Santo la sabiduría para discernir los caminos que la Congregación debe seguir en los próximos años, los participantes de la Asamblea Inspectorial reunidos en Lo cañas recibieron el saludo y la reflexión del Arzobispo de Santiago y Presidente de la Conferencia Episcopal de Chile, Monseñor Ricardo Ezzati, quien se refirió a la reciente Carta Pastoral de los Obispos.

“Soy salesiano y me siento de verdad parte de esta familia”

Antes de introducirse en la carta, el Pastor Arquidiocesano comenzó manifestando su cercanía a la comunidad salesiana. “Soy salesiano y me siento de verdad parte de esta familia. Siempre le agradezco a la Congregación lo que me ha ofrecido a lo largo de la vida, la formación que me ha entregado, la posibilidad de servir que me ha dado y todo ello lo veo como una providencial preparación a la tarea que después la Iglesia me ha pedido como Obispo… Muchísimas cosas de la formación salesiana y del espíritu salesiano, muchísimas fortalezas de nuestra espiritualidad, me han servido y me siguen sirviendo… soy un agradecidísimo hijo de Don Bosco y me siento muy bien en mi familia salesiana”.

Una preocupación desde el Evangelio

Refiriéndose a la carta, monseñor Ezzati señaló que ésta no nace de un día para otro. Hace años los obispos han profundizado en algunos aspectos que les preocupan en cuanto al crecimiento del país, reconociendo el camino positivo y el desarrollo que se ha vivido los últimos 30 años. Sin embargo, la preocupación tiene una perspectiva desde el Evangelio. “Los obispos no somos expertos ni en economía, ni en mercado, o en otras cosas, pero sí tenemos la luz del Evangelio que es una fuerza que quiere penetrar la cultura y el modo de vivir, y lo sentimos eso como un don”.

Desarrollo con rostro humano y equitativo

El Presidente de la Conferencia Episcopal señaló que la carta no es un juicio sobre el desarrollo, sino que es una invitación a darle rostro humano al desarrollo y es una invitación a que sea equitativo. “El objetivo fundamental de la carta es ayudar a los miembros de la Iglesia y a los hombres y mujeres de buena voluntad que quieran leer y acoger un mensaje, que puedan reflexionar, ubicar todas sus intencionales y propósitos, a darle al desarrollo de Chile”.

Cuál es la enseñanza de Jesucristo

El Arzobispo señaló que en la segunda parte de la carta pastoral se analizaron una serie de elementos que, en el contexto global del desarrollo de Chile -entendido éste no sólo como económico- aparecen debilidades. Por ejemplo, la insatisfacción, los problemas en la educación, el dolor. “Entonces nos hemos preguntado qué cosas enseña Jesucristo frente a estas situaciones… hemos buscado ofrecer una respuesta sometida a la posibilidad de profundización y de diálogo”.

Nunca el mal menor, sino el bien mayor

En cuanto a la interacción con el mundo político, a propósito de la carta pastoral y las decisiones que inciden en la vida de las sociedades, monseñor Ezzati indicó que los católicos nunca deben buscar el mal menor, sino que deben buscar el bien mayor. “Ahora, cuando se busca  el bien más grande, puede ser que en ese camino no se alcance dicho bien, pero no podemos partir desde la perspectiva doctrinal de decir nosotros buscamos el mal menor… creemos que el cristiano debe buscar siempre el bien superior y sabemos que, como es en nuestro camino de santidad, eso después tiene limitaciones, pero no puede ser que nos propongamos una meta mediocre. La meta que tenemos que proponernos es siempre una meta alta”.

Una alegría modesta que no nos debe impedir ofrecer el tesoro que tenemos

A propósito de las situaciones de escándalo de la Iglesia, Mons Ezzati señaló que “no queremos quedarnos entrampados y no tener la libertad de proclamar la verdad del evangelio… Estoy convencido que el momento actual que vive la Iglesia, como lo ha dicho el Papa al inaugurar el año de la fe, no es el momento del entusiasmo, de la alegría externa con la cual se abrió el Concilio Vaticano II. Hoy día, dijo el Papa, nuestra alegría es más modesta. Pero esa alegría más modesta no nos tiene que impedir de proclamar y ofrecer el tesoro que tenemos, que es Jesucristo y se mensaje”.

Fuente: Oficina de Información Salesiana – OFISA

Noticias relacionadas:

{module 98}

{module 67}

{phocagallery view=switchimage|switchheight=200| switchwidth=300|basicimageid=2000} {phocagallery view=category|categoryid=516| limitstart=0|limitcount=12|detail=5|displayname=0| displaydetail=0|displaydownload=0| imageshadow=shadow1|enableswitch=1| highslidedescription=3}