Los ejercicios espirituales anuales, momento de renovación espiritual para Salesianos de Don Bosco e Hijas de María Auxiliadora, se realizaron de forma remota en el Centro de Espiritualidad Lo Cañas, desde el 12 hasta el 25 de julio.
Este 2020, por razones de la pandemia cada comunidad realizó los ejercicios en sus respectivas casas, los que fueron preparados por el P. Gustavo Cavagnari, salesiano sacerdote argentino que en este momento se encuentra en medio oriente en una comunidad de formación teologal. Las temáticas en las que se profundizaron fueron ¿qué Salesianos para los jóvenes de hoy? y la carta del Papa Francisco enviada a la Congregación, ambos temas del último Capítulo General 28, realizado en Turín en febrero pasado.
El Provincial de los Salesianos de Chile, P. Carlo Lira, participó de esta instancia de oración y reflexión junto a sus hermanos y explicó que “los ejercicios anuales son la culminación del esfuerzo de conversión de cada salesiano y de las comunidades de la Inspectoría para vivir en fidelidad el proyecto de vida que hemos abrazado. Los ejercicios espirituales le van dando el tono de consistencia a nuestra vida salesiana. Quedé muy satisfecho por el trabajo y la experiencia vivida”.
Este año, los ejercicios espirituales culminaron con la renovación de votos de dos hermanos de la Inspectoría de Ecuador, Jean Carlos Cruzate y Jaime Geovanny Pastuña que concluyeron su período de votos temporales y los renovaron por un año más, siguiendo así, su experiencia como religiosos en este proceso de discernimiento en el que están para los votos perpetuos.
Para el estudiante del primer año de teología, Jean Carlos Cruzate, la experiencia fue revitalizante, orante y reflexiva sobre los aspectos de su vida como consagrado salesiano y también sobre la dura realidad que afecta al mundo a causa del coronavirus.
“Concluí el retiro de manera profunda y celebrativa renovando mi consagración como fruto del camino de discernimiento vocacional que estoy realizando en la formación teológica. El retiro espiritual me motivó para empezar con nuevas esperanzas y alegría este segundo parcial académico que empezará dentro de poco. Creo que la experiencia de los ejercicios espirituales son una gracia que el Señor nos regala cada año”, expresó el joven.
Jaime Pastuña, también de la comunidad del Teologado, agregó que los ejercicios espirituales fueron para él un meditar, contemplar y orar para tomar conciencia del camino recorrido, recapitular la propia vida, hacer síntesis personal, con el fin de reavivar el don recibido.
“Renovar los votos en medio de la situación de pandemia han sido de asombro y alegría de estar vivo. Me permitió reaprender lo que significa confiar en Dios y dejarse conducir por el espíritu Santo. Expresa además, nuestra entrega total a Dios, a los hermanos, viviendo el santo evangelio al modo de Don Bosco”, concluyó.
FUENTE: Comunicaciones Salesianos Chile