El tercer día de Asamblea Inspectorial, que se está llevando entre el 16 y 19 de mayo en el Centro de Espiritualidad de Lo Cañas, el discernimiento de los salesianos se ha centrado en la vocación del religioso coadjutor y la labor que ellos desempeñan en la Congregación y en las obras locales.
Esta instancia contó con la participación de P. Miguel Aguilar, director del Centro Regional del Salesiano Coadjutor de la Congregación con sede en Guatemala (CRESCO), quien hizo una reflexión sobre la figura del hermano coadjutor en la misión y los desafíos que se plantean para los tiempos actuales y el futuro, en términos de dar un impulso a su vocación.
Uno de los énfasis fue el dar a conocer una tendencia de elegir la opción sacerdotal por sobre la del coadjutor y el P. Miguel sostuvo que hay que tomar acciones para revertir esto: “Para que nosotros tengamos vocaciones de salesianos coadjutores, necesitamos pedir ‘obreros a la mies’; segundo, proponer imágenes significativas de salesianos coadjutores para que su rol sea conocido, y por último, sugerir nuevos campos que podrían ser para algún hermano coadjutor hoy, dependiendo de las necesidades de la Inspectoría”.
En cuanto a los desafíos que tienen los hermanos coadjutores hoy en día, el P. Miguel señaló: “Valorar al religioso no por ser sacerdote sino que por ser religioso, sin esto lo demás se derrumba. Valorando esto, estamos valorando la vida de los consagrados y valorando la vida de Jesús.”
Dando testimonio de esta opción de vida religiosa salesiana, expusieron el Hno. Fernando Saade, EDelegado de la Pastoral Juvenil Inspectorial de la Provincia Argentina Norte y el Hno. Rafael Muñoz, Coordinador de Pastoral de la Comunidad de Concepción.
Ambos hermanos se refirieron a la vocación del coadjutor, desde el proceso de discernimiento hasta cuando ya se tiene la plena certeza del rol, la importancia y la misión que tienen dentro del carisma salesiano.
“La vocación especifica del hermano es la vida religiosa con una dimensión que nos permite la flexibilidad en el servicio, para estar atento al grito del joven y del necesitado” señaló el Hno. Fernando Saade.
También el Hno. Rafael Muñoz comentó al respecto “ser Salesiano hermano o Coadjutor es precisamente acompañar a las personas en la construcción de su historia, en las elecciones que van tomando, en los caminos que van recorriendo; no es decidir por ellos ni caminar por ellos, es hacerlo al costado de ellos, animando, sosteniendo, escuchando”.
Durante la tarde, los participantes de la Asamblea, trabajarán en grupos junto a los coadjutores que han presentado sus experiencias y luego las iniciativas propuestas serán expuestas en plenario, a modo de buscar consenso a nivel inspectorial y local con el fin de favorecer el desarrollo de la vocación del coadjutor.
Fuente: Comunicaciones Salesianos Chile