Mons. González se refirió a la votación de la Ley de despenalización del aborto

El obispo de San Bernardo reflexiona, en una columna de opinión publicada por El Mercurio, sobre el rol de los parlamentarios en la recta final del proyecto de Ley que despenaliza el aborto en tres causales y el alcance que su discernimiento puede tener en la sociedad chilena.

En la edición del día miércoles 16 de marzo del diario El Mercurio el obispo de San Bernardo, monseñor Juan Ignacio González, realizó una reflexión pública en torno al rol que cumplen los parlamentarios en la discusión y aprobación de las leyes de la república, y en particular, sobre la decisión que deberán tomar en estos días sobre la Ley de despenalización del aborto en tres causales.

Mediante esta columna de opinión, Mons. González reconoció que el proceso de discernimiento al que se han visto sometidos los parlamentarios en la discusión de esta ley es muy compleja, al considerar que requieren interrogar a la propia conciencia, “Se trata de un juicio personal al que se llega como conclusión de un razonamiento que consiste en “aplicar a una situación concreta la convicción racional de que se debe amar, hacer el bien y evitar el mal” (VS 59)”, señaló. Y aunque se puede atribuir una decisión en contra de la vida como producto del error o la ignorancia, el obispo descartó esta posibilidad en caso los diputados y senadores. “Es muy difícil que en el nivel intelectual de los parlamentarios, personas capaces de informarse, estudiar, escuchar y reflexionar, se pueda alegar una conciencia que es incapaz de conocer el bien en una materia tan decisiva como es la salvaguarda de la vida humana concebida, sobre todo después del proceso legislativo recorrido”, afirmó.

Al finalizar, el obispo de San Bernardo recuerda que los parlamentarios fueron escogidos por la ciudadanía para velar por bien común, y aunque su discernimiento será producto de la reflexión individual y en conciencia, la decisión que tomen al respecto afectará no solo sus vidas, sino que influirá en el devenir de la sociedad chilena en su conjunto. “Al final, cada diputado y senador estará solo frente a su conciencia y su decisión afectará a muchas personas, pero en el caso concreto, afectará a la vida de otro ser de su misma especie y adquirirá la responsabilidad moral ante la sociedad y ante el Creador de haber sido instrumento esencial para impedirle ver la luz del sol que a todos alumbra por igual”, concluyó.

Fuente: Prensa CECh