Una innovación que en los ‘90 no logró convencer a la población, hoy cobra gran protagonismo, retomando su lugar en nuestras muñecas. Décadas más tarde resurgió, esta vez asociado al estilo fitness, y el último año para medir un indicador esencial para monitorear a los pacientes con Covid-19: la saturación.
Los gadgeds, o dispositivos electrónicos de única función, llegaron a revolucionar la experiencia del usuario en relación a su entorno. Desde las calculadoras, pasando por el personal stereo, que luego evolucionó a los iPod y mp3, hasta nuestros días, con un artículo cada vez más popular: los relojes inteligentes.
El primer smartwatch se lanzó al mercado en 1994 y fue desarrollado por Timex y Microsoft como un proyecto para la NASA. Fue probado fuera de nuestro planeta, buscando que arrojara datos sobre el cuerpo de sus usuarios, aún en movimiento.
El director general de Timex en México, Alejandro Castillo, aseguró en una entrevista para la revista Dinero que este reloj ayudaba a los astronautas a llevar un registro de su estado físico, recordar hidratarse, alimentarse y dormir bien, además de almacenar números de teléfono, entre otras cosas.
Sin embargo, en la década de los ‘90 este reloj aún no se ajustaba al estilo de vida que llevaba dicha generación. Sus funcionalidades no fueron demasiado atractivas para los consumidores, por lo cual dejó de producirse. Décadas más tarde resurgió, esta vez asociado al estilo fitness, y el último año para medir un indicador esencial para monitorear a los pacientes con Covid-19: la saturación.
Deporte y estilo de vida
La vida saludable y el deporte comenzaron a tener mayor preponderancia en la sociedad, lo que abrió un espacio en el mercado a los smartwatchs, dispositivos capaces de conectarse con el teléfono y sincronizar datos, almacenando información sobre la frecuencia cardíaca y otros indicadores de salud en tiempo real.
Hoy es un dispositivo muy común entre los deportistas de alto rendimiento y que gracias a la vorágine tecnológica actual se ha democratizado su uso en la población. “Esta herramienta es muy útil, ya que favorece la evaluación constante y rendimiento físico en nuestros objetivos deportivos”, asegura Leonardo Tamayo, personal trainer certificado y embajador de la marca internacional de programas de entrenamiento LesMills en Colombia.
Cómo elegirlos
Marcas como Xiomi, Samsung, Polar, Huawei, Amazefit y Apple coinciden en presentar al público un reloj que se vincule al estilo de vida del portador. Mientras que se le brinde información sobre el peso corporal, medidas, datos personales y se sincronice con el celular, este será capaz de monitorear el impacto de la rutina diaria del usuario.
Un parámetro es el ritmo cardíaco, observando, por ejemplo, la intensidad de los entrenamientos y aportando pautas para mejorar el estado físico. Si no se está entrenando, el mismo reloj aconsejará moverse un poco para romper con la rutina y el sedentarismo.
Otro, que involucra más variables, es el control del peso corporal mediante un programa de entrenamiento personal, según las necesidades específicas de cada usuario. Analiza en tiempo real frecuencia cardíaca, pasos y calorías totales, que incluyen las calorías activas, que se queman en una actividad física, y aquellas que se queman con la rutina diaria: cocinar, moverse por la casa u oficina, etc. “Son elementos de ayuda para tener un control de las horas de entrenamiento y, lo más importante, para saber cuánta actividad tienes. Los pasos son muy representativos. El tema es que no podemos seguir al 100% el consumo calórico, porque son estimaciones”, comenta Lidia Bodoque, embajadora entrenadora certificada de Lesmills España y la marca de reloj deportivo Polar.
Otra de las características generales radica en el monitoreo y medición del descanso nocturno, el cual es clave para tener una buena salud física y mental, dando indicadores en relación al sueño profundo, sueño ligero y los tiempos de insomnio.
¿Cuánto saturas de oxígeno?
Apple presentó su última versión de reloj inteligente en 2020, dando un paso definitivo y diferenciador en relación a otras marcas deportivas, como Polar y Xiaomi.
Tim Cook, representante de la entidad, aseguró en el último evento de lanzamiento en California, que entre otras fortalezas, el Apple Watch SE y el Series 6 tienen la posibilidad de medir el nivel de oxígeno en la sangre, detectando eventuales problemas cardíacos, cerebrales o incluso prevenir y controlar el Covid-19, avisando al portador la importancia de hacerse un chequeo médico. Para esto, el reloj solo necesita 15 segundos para calcular el color de la sangre bajo las arterias y así detectar el nivel de saturación.
Sumado a lo anterior, también cuenta con otras funcionalidades importantes para esta época de pandemia: electrocardiograma periódico y la detección de un buen lavado de manos, avisando de los segundos necesarios para un lavado eficiente, insistiendo para que lo finalicemos de forma correcta.
En definitiva, son muchas las ventajas que se tienen a la hora de optar por un reloj inteligente, desde leer tu correo electrónico, tener tu agenda personal en la muñeca, responder llamadas, hasta tener la posibilidad de monitorear tu estado físico y estar al día con tu salud. Las grandes empresas de tecnología aún siguen aprendiendo y buscando la manera de ofrecer una mejor calidad de vida a través de la tecnología.
Por Gustavo Cano, periodista