Durante 2019 y 2020 nuestro país está viviendo dos sucesos sin precedentes: una fuerte crisis social y una pandemia que nos obligó a confinarnos en nuestros hogares. Pero estos acontecimientos no fueron impedimento para que Salesianos Cooperadores (SSCC), grupo de la Familia Salesiana, siguiera su camino para mantener la vida comunitaria y ayudar a los más necesitados.
Cuando llegó la pandemia a Chile enviaron una carta a las comunidades locales invitando a poner en práctica diversas iniciativas. Entre las primeras, animar con un mensaje de afecto, cercanía y esperanza a quienes se encuentren más vulnerables y deprimidos, además de estar atentos a las necesidades de los más pobres y así perseverar en las obras de misericordia espirituales y corporales.
La comunidad de Salesianos Cooperadores de Iquique mantuvo su aporte al comedor solidario “Divina Providencia” del Santuario Sagrado Corazón de Jesús de la ciudad, lugar que sigue atendiendo entre 70 y 80 hermanos en situación de calle y a familias que han sido golpeadas por el Covid-19.
Una de las ayudas más significativas que realizó el grupo se efectuó en Santiago, donde canalizaron una donación importante de alimentos a la Parroquia Domingo Savio de San Ramón, a las Hijas de María Auxiliadora (FMA) y a ollas comunes vecinales de la comuna de El Bosque. Buena parte de las comunidades del país se ha preocupado de apoyar a ollas comunes que han proliferado a lo largo de Chile.
Iglesia en salida
Los Salesianos Cooperadores comprenden su apostolado solidario como parte de su misión como grupo integrante de la Familia Salesiana y de la Iglesia, entendiendo que como laicos tienen que ser especialmente solidarios allí donde se encuentran, haciendo realidad la “espiritualidad de lo cotidiano”.
Además de estar en completa sintonía con lo que plantea el Rector Mayor, P. Ángel Fernandez, de no quedarse fuera de la formación del buen cristiano y honrado ciudadano. “Como educadores y como cristianos, como Familia Salesiana de Don Bosco hoy aspiramos a una acción política que es social: una acción que contribuya a la solidaridad, a la fraternidad humana, al verdadero encuentro que acepta y respeta al otro, a la realización del ‘Reino de Dios’ aquí y ahora”.
Para Sergio Yañez, coordinador nacional de los Salesianos Cooperadores, estar ajenos a la realidad nacional sería una incoherencia. “Como cristianos debemos expresarnos políticamente en vista del bien común, especialmente porque hoy es imperativo ser un aporte serio para contribuir a ‘soñar’ el país que queremos”, agregó.
Sin las redes sociales habría sido muy difícil mantener la vida comunitaria. Han visto cómo la “cultura del encuentro” se ha visto favorecida, porque la tecnología los ha ayudado a seguir comunicados, reviviendo lo comunitario y celebrativo, acompañando al que está con problemas o se siente deprimido. Hoy todas las comunidades locales se reúnen por medio de videoconferencias.
“La comunión de la Familia Salesiana se expresa compartiendo la vida y la misión. Es indispensable para seguir ayudando, no solo a los golpeados por esta pandemia, sino para contribuir a la construcción del Reino de Dios permanentemente, especialmente salvando a los jóvenes. Ellos deben ser protagonistas para enfrentar dificultades humanitarias de cualquier envergadura y para darle un sentido a la vida, como discípulos misioneros de Jesucristo. Sin descuidar, por supuesto, nuestra presencia en el mundo, como ‘Iglesia en salida’ ”, expresó Sergio.
Comunicaciones Salesianos Chile