Esta vez en Panamá se llevó a cabo una nueva edición de la Jornada Mundial de la Juventud, evento que durante enero congregó a poco más de 700 mil jóvenes con el Papa Francisco.
La delegación salesiana chilena estuvo constituida por 71 jóvenes provenientes de las comunidades educativas de los colegios de Iquique, Alto Hospicio, Antofagasta, Valdivia y de la Universidad Católica Silva Henríquez. El grupo de Antofagasta fue acompañado por el salesiano P. Oliver Villarroel.
Las Hijas de María Auxiliadora estuvieron representadas por Sor Doménica González, Delegada de Pastoral Juvenil, junto a dos muchachas. Además, Sor Luisa Vargas acompañó a jóvenes de la comunidad diocesana de San Cayetano de La Legua, Santiago.
Una particularidad de este encuentro fue su identidad salesiana marcada por varios hechos: la elección de dos santos de nuestro carisma elegidos patronos del evento (beata Sor María Romero y San Juan Bosco); las especiales palabras que dedicó Francisco a nuestro Fundador en la vigilia previa a la misa de clausura, y la fiesta en la que nuestros muchachos y muchachas del Movimiento Juvenil Salesiano compartieron con los superiores generales de los Salesianos y de las Hijas de María Auxiliadora.
Reemplazar miedo por confianza
El miércoles 23 de enero, mismo día de la llegada del Papa Francisco a Panamá, la juventud salesiana se reunió con el Rector Mayor de los Salesianos, P. Ángel Fernández, y con la Superiora General de las Hijas de María Auxiliadora, Sor Yvonne Reungoat.
El encuentro se realizó en el Instituto Técnico Don Bosco de Ciudad de Panamá, lugar que se transformó en un verdadero oratorio. Se congregaron más de 2.500 jóvenes procedentes de 30 países, quienes oraron especialmente por la paz y la unidad en Venezuela y Nicaragua.
Las palabras al cierre del P. Ángel y de Sor Yvonne fueron contundentes: “Reemplacen el miedo por la confianza, allí está la fuente de la paz y la respuesta valiente a Jesús”, dijo Madre Yvonne.
“El Papa Benedicto XVI les ha dicho: ‘Queridos jóvenes, no tengan miedo a lo que Dios les pida, de eso se trata, de vivir tan apasionadamente la vida sin tener miedo...’”, recordó el P. Ángel.
Mirar con los ojos de Dios
El jueves 24 de enero, los peregrinos dieron la bienvenida al Santo Padre, momento en el que fueron presentados los ocho santos y beatos patronos de la JMJ 2019. Jackson François, joven haitiano, presentó en creolé a San Juan Bosco y a la Beata Sor María Romero.
Uno de los momentos más emotivos para nuestra Congregación se vivió durante la noche del sábado 26 de enero, cuando el Papa Francisco se refirió a San Juan Bosco en medio de la vigilia preparatoria a la Santa Misa en el Campo San Juan Pablo II.
“Don Bosco no se fue a buscar a los jóvenes a ninguna parte lejana o especial, simplemente aprendió a ver todo lo que pasaba en la ciudad con los ojos de Dios y, así, su corazón fue golpeado por cientos de niños, de jóvenes abandonados sin estudio, sin trabajo y sin la mano amiga de una comunidad. Mucha gente vivía en la misma ciudad, muchos criticaban a esos jóvenes, pero no sabían mirarlos con los ojos de Dios. A los jóvenes hay que mirarlos con los ojos de Dios”.
Prosiguió el Santo Padre: “Don Bosco se animó a dar ese primer paso: abrazar la vida como se presenta y, a partir de ahí, no tuvo miedo de dar el segundo paso: crear con ellos una comunidad, una familia donde con trabajo, estudio, se sintieran amados. Darles raíces desde donde sujetarse para que puedan llegar al cielo, para que puedan ser alguien en la sociedad, darles raíces para que se agarren y no los tire abajo el viento que viene, eso hizo Don Bosco, eso hacen los santos, eso hacen las comunidades que saben mirar a los jóvenes con los ojos de Dios”. Diego Godoy (16), alumno del Instituto Salesiano de Valdivia (ISV), compartió lo vivido en esos días. “Para mí la JMJ tiene un significado de entrega, unión y, sobre todo, de reencuentro con Dios. Conocer otras culturas, lugares, personas te hace apreciar y disfrutar más del encuentro con el sucesor de San Pedro. Haber participado en la reunión del MJS también fue muy significativo, la manera en la que te recibe la Familia Salesiana es hermosa, como si te conocieran de toda la vida”.
Ponerse de pie HOY
El mensaje del Papa Francisco en la Misa de clausura sigue resonando en el corazón de los jóvenes alrededor del mundo.
“Porque ustedes, queridos jóvenes, no son el futuro. Nos gusta decir que son el futuro, no. Son el presente, ustedes jóvenes son el ahora de Dios. Él los convoca y los llama en sus comunidades, los llama en sus ciudades para ir en búsqueda de sus abuelos, de sus mayores; a ponerse de pie y junto a ellos tomar la palabra y poner en acto el sueño con el que el Señor los soñó”.
La JMJ Panamá será recordada por su identidad salesiana. Fue realizada en enero, mes de especial importancia para nuestro carisma. El 22, día que comenzó, se celebra la Fiesta de Laura Vicuña. El 24, mientras miles de jóvenes daban la bienvenida a Francisco, celebrábamos a San Francisco de Sales. El encuentro concluyó el 27 y se convirtió en la antesala para la celebración de San Juan Bosco el 31 de enero; es más, el Rector Mayor permaneció en Panamá para celebrar el triduo a Don Bosco y la gran fiesta del 31 junto a la comunidad panameña.
Por Karina Velarde, periodista