En sus primeras palabras en Chile dirigidas a las autoridades, la sociedad civil y el cuerpo diplomático, el Papa Francisco destacó el desarrollo democrático de nuestro país del último tiempo que ha permitido el progreso y señaló que si el bien común no tiene carácter comunitario, nunca será un bien.
Tras un recorrido por la calles de la Capital desde la sede de la Nunciatura Apostólica en la comuna de Providencia, el Santo Padre llegó hasta el Palacio de La Moneda, a eso de las 8.20 AM, en la comuna de Santiago Centro, donde fue recibido por la presidenta de la República, Michelle Bachelet.
Junto a las autoridades eclesiásticas encabezadas por el Nuncio Apostólico, Ivo Scápolo y el Cardenal Ricardo Ezzati, se encontraban el presidente electo, Sebastián Piñera y el expresidente Ricardo Lagos.
La presidenta Bachelet dio la bienvenida a Francisco expresando “Hoy le abrimos la puertas de Chile a un amigo… Su visita nos hace bien, porque nos hace bien detener la marcha acelerada para mirar al otro”.
El Papa manifestó su alegría por estar nuevamente en suelo latinoamericano, en particular una tierra que lo hospedó y donde vivió parte de su formación como religioso jesuita. “Quisiera que este tiempo sea un tiempo de gratitud por tanto bien recibido”.
En su mensaje el Santo Padre destacó el sostenido desarrollo de la democracia en nuestra patria durante los últimos años, que ha permitido el progreso.
Recordó las palabras del Cardenal salesiano Raúl Silva Henríquez, cuando en un Te Deum afirmaba: “Todos somos constructores de la obra más bella, la patria… la patria terrena que prefigura la patria sin fronteras. Esa patria no la iniciamos nosotros; pero no puede progresar sin nosotros”.
Asimismo, recordó A San Alberto Hurtado cuando decía: “Una nación, más que sus fronteras, su naturaleza... es una misión a cumplir”.
Francisco también señaló que el “la justicia, el amor y la solidaridad no se alcanzan de una vez para siempre. Hay que conquistarlos cada día”.
Respecto del modo de enfrentar la construcción del devenir, el Papa enfatizó la idea de que “el bien común si no tiene un carácter comunitario nunca será un bien”.
Se refirió a la necesidad de atender las necesidades de quienes sufren y quienes requieren especial cuidado: los migrantes, los adultos mayores, los jóvenes, en su afán de tener más oportunidades, especialmente en el plano educativo; y los niños.
En su referencia a los niños, el Papa señaló: "No puedo dejar de manifestar el dolor y la verguenza por el daño causado a niños por parte de ministros de la Iglesia. Me quiero unir a mis hermanos del episcopado porque es justo pedir perdón y acompañar a las víctimas”.
Fuente: Comunicaciones Salesianos Chile