Carlos Alarcón, Cristóbal Callejas, Daniel Irarrázabal, Diego Miranda, Manuel Reyes y Alexis San Martín fueron ordenados sacerdotes para anunciar el Evangelio el sábado 25 de abril en la Catedral Metropolitana. La misa fue presidida por el Arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati. Con alegría y emoción fueron ordenados presbíteros 6 jóvenes que terminaron un camino de aproximadamente 8 años de formación en el Seminario Pontificio de Santiago. La misa estuvo llena de gozo y recogimiento por este gran regalo para el pueblo de Dios. Tras la proclamación de las lecturas, el presbítero Cristián Castro, rector del Seminario Pontificio de Santiago, presentó a los seis jóvenes al Arzobispo y dio fe de su preparación para asumir el ministerio sacerdotal. Luego, en su homilía, el Arzobispo de Santiago explicitó que “la experiencia espiritual sobre la cual se funde la vida y el ministerio de un presbítero, hunde sus raíces en la conciencia de haber sido llamado y elegido gratuitamente por el Señor”. Esta elección, durante toda la historia de la salvación y hasta el final de los tiempos, tiene un para, un propósito, puntualizó el cardenal y es “para proclamar el designio liberador de Dios, para anunciar el Evangelio a los pobres”. “Queridos ordenandos, les toca el privilegio de vivir su ministerio en tiempos desafiantes, difíciles, casi en un desierto”, advirtió el Arzobispo, pero a partir de esta experiencia podemos descubrir nuevamente la alegría de creer y el valor de lo esencial para vivir, agregó citando al Papa Francisco. “Sí, en medio del desierto de la cultura de hoy, el Señor los llama a ser sembradores de esperanza y de vida nueva”, les dijo. Pero no de manera solitaria, sino como miembros de la Iglesia y de la comunidad cristiana. Añadió: “Serán consagrados para ser ministros de Cristo, especialmente para aquellos hermanos y hermanas que viven al descampado, olvidados, discriminados, considerados muchas veces como la basura de la humanidad”. Finalmente los invitó a ser otros Cristo, “capaces de infundir esperanza, capaces de anunciar palabras de vida, humildes servidores de la vida abundante que el Señor quiere para todos sus hijos”. Gozo y gratitud Después de la plática, los ordenandos hicieron sus promesas ante el obispo quien pronunció la oración consecratoria, recibieron la imposición de manos de parte del Pastor y de los sacerdotes de la Arquidiócesis y finalmente fueron ungidos con crisma en sus manos. Como signos de su sacerdocio recibieron la estola y la casulla de parte de sus familiares y amigos, además el arzobispo les entregó el cáliz y la patena. Al concluir la Eucaristía, cada uno de los nuevos presbíteros recibió el cariño de sus comunidades y de la Iglesia entera por medio de aplausos, abrazos y felicitaciones. Las destinaciones de los jóvenes sacerdotes son: Carlos Alarcón en la Parroquia Santa Teresa del Niño Jesús Cristóbal Callejas en la Parroquia Nuestra Señora de la Visitación Daniel Irarrázabal en la Parroquia San Luis Beltrán Diego Miranda en la Parroquia Jesús Señor de la Vida Manuel Reyes en la Parroquia Nuestra señora de Montserrat Alexis San Martín en la Parroquia María Magdalena Fuente: Comunicaciones Santiago www.iglesiadesantiago.cl |
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