“Estoy convencido que toda nuestra vida debe ser para servir”

“Siempre he dicho que sí al Señor, no siempre convencido, pero con gran disponibilidad”, fueron parte de la homilía de Don Ángel Fernández Artime, a los hermanos de la Casa Generalicia, durante la Eucaristía de agradecimiento a Dios por su cumpleaños, el 21 de agosto.

En su corta homilía, el Rector Mayor habló de aspectos como la comunidad, su familia, el servicio y el descubrimiento de su vocación.

Inicialmente se refirió a los hermanos de la Casa Generalicia: “Un gracias a mis hermanos, sus oraciones y la presencia aquí; ustedes son mis hermanos y mi comunidad (…) Muchas veces vivimos tantos años juntos y no conocemos la historia de los hermanos, y esto es un gran pecado que indica que algo no funciona bien”.

Y relacionado con ello, narró parte de su historia: “Agradezco a Dios por mi familia y el origen humilde de la misma”; añadió además que se siente orgulloso de ser un hijo de pescador. Y comentó que debería de ser pescador, pero que “los caminos de Dios son así, y tuve la oportunidad de conocer y estudiar con los salesianos, y fue allí donde sentí la necesidad de experimentar y vivir como salesiano”.

Finalmente se refirió al servicio: “Soy feliz porque el Señor me ha dado grandes cosas, y no por ser Rector Mayor; Siempre he sentido la presencia de Dios, siempre he dicho que sí al Señor, no siempre convencido, pero con gran disponibilidad (…) Estoy convencido que toda nuestra vida debe ser para servir”.

Fuente: InfoANS

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