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El P. Juan Ángel Ibáñez festejó sus Bodas de Plata sacerdotales con una Eucaristía celebrada el sábado 28 de junio, en el Santuario María Auxiliadora, y en la que participaron integrantes de la CEP, de la Familia Salesiana y de la Pastoral, e invitados especiales. La Misa comenzó con el ingreso de la Comunidad Religiosa y del P. Director, quien fue revestido por integrantes de la pastoral y de la familia salesiana de Concepción. Jóvenes de Campo Bosco dedicaron una interpretación de la pieza “Vamos a Limpiar el Mundo”, del Musical de Don Bosco, tras lo cual el P. Alfonso Horn, leyó el Evangelio. En su homilía el Director invitó a pasar adelante a tres personas que resumen el trabajo de toda una vida dedicada a la educación salesiana: su ex alumno y actual Director del Colegio Madres Dominicas, Jorge Toro; al Sub Director de la época en que realizó su Tirocinio en Concepción y actual funcionario de la Secretaria Regional Ministerial de Educación, Mario Bustamante, y a quien fuera por ese tiempo una integrante del Movimiento Juvenil Salesiano. “Estas tres personas son parte de mi historia, y sé que detrás de ellos hay muchas personas que en estos 25 años de vida sacerdotal han fortalecido mi misión y vocación salesiana”, explicó. A continuación, el P. Juan renovó su fe en Dios y su vocación de pastor en medio de los jóvenes realizando una nueva profesión de fe, colocando su mano sobre una biblia abierta, la que fue llevada a su presencia por un par de integrantes de la Comunidad Valdocco. En la presentación de los dones, una joven del Movimiento Scouts Salesianos de Concepción presentó una figura del Buen Pastor, representación del modelo de vida y consagración de todo salesiano y proyecto de ministerio para todo sacerdote; y junto al pan y al vino, una estola de color morado, uniendo así el doble misterio de la presencia de Cristo en la Eucaristía y en el sacramento de la Reconciliación. Luego de la comunión, el P. Víctor Mora celebró la renovación de la Consagración sacerdotal a través de la unción de sus manos, de padre y pastor con aceite, por parte de dos integrantes de la presencia Salesiana. Luego de lo anterior se celebró el signo de la luz, a través del cual se retribuyó las miles de bendiciones que el Padre Director ha impartido en estos 25 años de vida sacerdotal. Para ello ingresó un grupo de 7 personas que llevaban consigo una vela, cuya luz representaba a Cristo Resucitado, tras lo cual se oró por el P. Juan. Tras el envío final, el P. Alfonso Horn compartió un texto que escribió pensando en las virtudes que debe tener un Superior, el que provocó risas a los asistentes. Las celebraciones por las Bodas de Plata continuaron después de la Eucaristía con un espectáculo que prepararon las experiencias asociativas de la obra penquista, y una cena con la que se homenajeó a nuestro Director en sus 25 años de Ministerio Sacerdotal. Fuente: Comunicaciones Salesianos Concepción Noticias relacionadas:
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