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Al medio dia del 29 de septiembre el Rector Mayor P. Pascual Chávez ha presidido el envío de la 144 expedición misionera. La basílica de María Auxiliadora de Turín estaba repleta de jóvenes, salesianos, Hijas de María Auxiliadora y miembros de la Familia Salesiana que celebraron la alegría de ser enviados a evangelizar. Este año junto a los salesianos han recibido el crucifijo 16 Hijas de María Auxiliadora y 6 Laicos voluntarios. Los nuevos misioneros provienen varios continentes, y algunos tienen como destinación países de Europa que desde hace algunos años está considerada como tierra de evangelización y la Congregación Salesiana continúa enviando misioneros a través del proyecto Europa. En su homilía Don Pascual Chávez comentó el evangelio que habla de Lázaro y llamó a los misioneros a tener especial sensibilidad por los millones de Lázaros que sobreviven en condiciones miserables a la sombra de nuestras sociedades opulentas y centradas en el consumo. Los misioneros salesianos desde siempre se han tenido un especial cuidado por los marginados y los más pobres, Don Bosco siempre ha insistido a sus hijos a ir al encuentro de los más necesitados. La celebración del envío misionero es una tradición que ha iniciado el mismo Don Bosco. El 11 de noviembre de 1875, siempre en la Basílica de María Auxiliadora, ha sido entregado el crucifijo misionero, signo del envío evangelizador educativo, a los primeros salesianos destinados a la Patagonia Argentina. Dos años después, las Hijas de María Auxiliadora se suman a los Salesianos de manera definitiva en las siguientes expediciones misioneras. En estos últimos se han unido los laicos Cooperados Salesianos y de las ONG salesianas. En la celebración estaba presente Madre Ivonne Reungoat y superioras de las FMA acompañando esta fiesta de Harambée. Fuente: InfoANS |
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