Ordenación Sacerdotal Patricio Julio: “Dios existe y puede llenar la vida de un hombre”

“Lo que más resuena en mi corazón es que recen y que me acompañen, para cada día asemejarme al Jesús Buen Pastor”. Fueron parte de las palabras de agradecimiento del salesiano Patricio Julio Orellana, al término de la celebración en la que recibió el Orden del Presbiterado, el sábado 11 de mayo, en el Colegio El Patrocinio de San José.

Presidió la celebración el Arzobispo de Santiago, Monseñor Ricardo Ezzati. Concelebraron el P. Inspector Alberto Lorenzelli, los integrantes del Consejo Inspectorial y salesianos de varias comunidades de Santiago y del resto del país.

En la asamblea los familiares, amigos y alumnos de primero medio de Patricio; también miembros de los grupos de la Familia Salesiana; de la comunidad del PSJ, sede de la celebración y donde Patricio vive y ejerce el servicio de Coordinación Pastoral; y también representantes de comunidades donde Patricio ha desarrollado parte de su formación o ha ejercido apostolado: La Serena, parroquia “Sagrada Familia” de Macul, parroquia “Jesús El Señor” de La Florida y Valparaíso.

Entre los varios momentos de intensidad y emoción de la celebración, destacaron algunos como en el que el neo sacerdote fue revestido con la casulla y estola, acompañado por sus familiares y por el P. Marco Vergara. Así también, al final de la celebración, el P. José Lino Yáñez, Director de la comunidad del PSJ, leyó un mensaje del Papa Francisco por el cual confería la bendición apostólica a Patricio.

En su homilía, Mons. Ezzati, en alusión a la carta de San Pablo a los Corintios donde se concibe y sabe como una vasija de barro, recordó que los apóstoles no son más que simples servidores, movidos por la fuerza del amor. “No se predican a sí mismos, sino a Jesucristo como Señor. No tienen poder alguno que provenga de su origen. La salvación que anuncian y celebran viene de Dios. Por eso no hay lugar para el desaliento, porque ese poder tan grande justamente viene de Dios y no de nosotros”.

Refiriéndose a misma carta, el Pastor Arquidiocesano indicó que el texto pone en evidencia también otra condición que acompaña la vida de todo apóstol: “la verdad desafiante y a veces hostil y la gracia que acompaña el ministerio: Aunque lleno de problemas, no nos encontramos sin salida; tenemos preocupaciones pero no nos desesperamos; nos persiguen pero no estamos abandonados; no nos derriban, no nos destruyen”.

Dirigiéndose a Patricio, Mons. Ezzati señaló: “La aventuras de los dos discípulos de Emaús te recuerde siempre que Jesús camina a tu lado, que nunca estarás solo, especialmente en los momentos de desaliento y turbulencia. Te recuerde también que deberás tener los ojos abiertos y el corazón atento para discernir su paso y reconocerlo como el Señor y maestro”.

Agradecimientos

Al concluir la celebración, Patricio señaló que quiere ser un sacerdote de la gente, de los jóvenes en especial, estar disponible a sus preguntas y necesidades. “Lo que más resuena en mi corazón –añadió- es que recen y acompáñenme, para cada día aseméjame al Jesús Buen Pastor… Quiero gritar al mundo que Dios existe y puede llenar la vida de un hombre, la mía y la de cualquier persona, sólo basta que le abramos el corazón”.

Reseña biográfica

Patricio Antonio Julio Orellana nació en Valparaíso el 17 de diciembre de 1982. Hijo de Patricia y Antonio. Hizo sus estudios en el Colegio Salesiano “del puerto”, donde descubre la vocación salesiana a través de la experiencia llamada “oratorio” que se realizaba en compañía de los salesianos que en ese tiempo pertenecían a la comunidad de Valparaíso

Inició su camino vocacional ingresando al Prenoviciado el 28 de enero de 2002, donde comenzó a trabajar en el Centro Juvenil Don Bosco, y al año siguiente hace la experiencia del noviciado, teniendo como maestro de novicio al P. Vicente Soccorso.

Realiza su primera profesión el 30 enero de 2004; siendo posnovicio, trabajó en la obra salesiana de San Ramón y del Oratorio Don Bosco, donde descubre el rostro cada vez más concreto de Dios que lo llama a entregar todas sus energías a los jóvenes. Se unió al Oratorio Multimedial “Caetera Tolle”, donde actualmente colabora.

Su práctica pastoral la realizó como asistente de Novicios y en la obra salesiana de La Serena que fueron experiencia que acompaña la vida vocacional de Patricio.

Entre los años 2010 – 2012, realizó sus estudios de teología y pedagogía, colaborando además al Equipo Inspectorial de Pastoral Vocacional. El año 2011 recuerda con especial cariño a todos los jóvenes y adultos de la Parroquia Jesús el Señor que lo han hecho crecer en el servicio y la caridad hacia los más necesitados.

El 2012 fue ordenado diácono ejerciendo este servicio en la Parroquia “Sagrada Familia” de Macul, lugar que recuerda con especial cariño.

En el año 2013 es destinado a formar parte de la comunidad salesiana “El Patrocinio de San José” como diácono, coordinador de la pastoral juvenil de la presencia junto a sus hermanos de comunidad. Como lema de ordenación ha escogido un texto de San Lucas, “Te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra.” (Lc, 10, 21).

En este día, damos gracias a Dios por el regalo de la Ordenación Sacerdotal y le pedimos que le de fuerza para seguir la misión de Don Bosco en medio de los jóvenes.

Fuente: Oficina de Información Salesiana – OFISA