“El fuego no puede destruir la esperanza y las ganas de seguir trabajando”, fue el mensaje que monseñor Fernando Chomali llevó a los centenares de comerciantes del mercado central de Concepción, que fue destruido por un gigantesco incendio. Dirigentes gremiales de los locatarios invitaron a Monseñor Chomali a celebrar una liturgia en las proximidades de las ruinas, en pleno centro de la ciudad, lugar al que llegó también el alcalde de la comuna, Álvaro Ortiz, quien agradeció el gesto del Pastor. Acompañado por el Pbro. Roberto Valderrama, el Arzobispo hizo una reflexión para animar a los damnificados, estimando que los afectados superan las 5 mil personas – locatarios y sus familias y trabajadores – sin considerar a los proveedores. “Es tanta gente que trabaja y lleva el pan a su casa. Demos a gracias a Dios que no hubo pérdidas humanas, pero el fuego ha provocado un gran daño: años de esfuerzo, de ahorro y de recuerdos perdidos. Vengo a decirles que el fuego no puede destruir la fe en Dios ni destruir la esperanza; no puede destruir las ganas de trabajar ni puede destruir el anhelo de una vida mejor”. Les indicó que “ya hay muchas personas que quiere ayudarlos y yo me sumo a ellas, porque Concepción sabe de sufrimientos, pero también cómo levantarse. Ahora, cada uno de nosotros debe colocar lo mejor de sí, porque el fuego no puede destruir nuestro futuro ni puede destruir el futuro de sus hijos y sus nietos. Este es un trabajo que es honesto y he venido a hacer oración, porque Dios no los va a abandonar. Hay mucha gente comprometida para sacar adelante este proyecto”. Y confió en que Dios “convierta este momento tan doloroso, en un mejor futuro, en mayor solidaridad y mayor esfuerzo. Demostremos que la desgracia no es la última palabra, sino que la vida, el amor y el esfuerzo y también la solidaridad, permitirán sacar adelante este proyecto, que es un verdadero ícono para la ciudad”. El dirigente de los comerciantes, Juan Antonio Kelly, agradeció al Arzobispo por su preocupación. “Se lo agradecemos, ya que necesitaremos muchas bendiciones para el trabajo de la gente. Las mujeres trabajan con empeño. Fuimos a la reunión con el fiscal y nos avisó que es imposible ingresar ahora al interior de lo que quedó, porque los peritos no han concluido y hay mucho riesgo. Y también hablé con el director de ONEMI, para poder limpiar y quiero destacar que el alcalde nos ha acompañado desde el primer momento. No necesitamos a las autoridades que vengan sólo para la foto, necesitamos autoridades que trabajen junto a nosotros. Queremos una reconstrucción rápida, pero aquí. Este es un mercado familiar y de tradición. Pedirle monseñor, que nos ayude a decirle a la ciudad que se acerque y nos apoyen. Mañana habrá una olla común que vamos a compartir”. El alcalde Álvaro Ortiz también agradeció al Arzobispo por acompañar a los comerciantes y sus familias. “Creo que Dios se ha hecho presente y yo les pido que tengan fe, porque quien sea, necesitaremos siempre la ayuda de Dios. Queremos que esto viva y con la ayuda de toda la ciudad: vengan a comprar en los locales que pronto abriremos y dar vuelta esta triste página. Gracias, monseñor por sus palabras de aliento”, concluyó. Fuente: Comunicaciones Concepción |
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