Mons. Ivo Scopolo destacó que no puede haber una conversión auténtica del pueblo de Dios, si no hay una conversión de sus pastores. Con una Eucaristía presidida por el Nuncio Apostólico de Su Santidad en Chile, monseñor Ivo Scapolo, se inauguró la 104ª Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal de Chile. El encuentro se realiza en Punta de Tralca, entre el 12 y 16 de noviembre. En su homilía, monseñor Scapolo no sólo recordó al obispo y mártir San Josafat, sino que también citó las palabras de Benedicto XVI sobre los dos mil años de la historia de la Iglesia y la persecución de la que han sido víctimas los cristianos. Sin embargo, destacó que el daño mayor es el que contamina la fe, provocando un debilitamiento de su capacidad de profecía y testimonio. Por otra parte, el Nuncio Apostólico destacó que el Año de la Fe es una invitación a una conversión renovada, “pero que no puede haber una conversión auténtica del pueblo de Dios, sino no hay una conversión de sus pastores”. El tema principal de esta Asamblea es el Año de la Fe. Los obispos harán su reflexión a partir de una fundamentación bíblica y otra teológica, las que serán enriquecidas con trabajo personal y grupal, y la experiencia de los obispos chilenos que participaron en la XIII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos sobre “La nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana”. Además de este tema central, los Obispos dialogarán, como es habitual, sobre la realidad del país y de la Iglesia, y analizarán la marcha de los distintos organismos del Episcopado y sus áreas pastorales. De un modo especial conversarán acerca del proceso de Asamblea Eclesial con vistas a la preparación de las próximas Orientaciones Pastorales nacionales, proceso que ya se inició con asambleas diocesanas. Encuentro con la prensa Al término de la misa inaugural de la 104ª Asamblea Plenaria, el presidente de la Conferencia Episcopal, Mons. Ricardo Ezzati, se reunió con los medios de prensa que llegaron hasta la Casa de Ejercicios de Punta de Tralca. ¿Cuál será el énfasis de esta Asamblea Plenaria? Vamos a reflexionar lo que significa para nosotros los obispos el Año de la Fe; estamos llamados a entrar por la puerta de la fe para profesar solemnemente nuestra fe. El Papa nos ha dicho para este año que profesar la fe significa ponerse de rodillas solamente delante de Dios porque es el único absoluto, el resto es todo relativo. Y nosotros como obispos queremos llegar a esa profesión de fe y comunicarlo con la fuerza del testimonio para confirmarlos en el camino de la fe. ¿Cómo afecta a la credibilidad de la Iglesia la situación de Mons. Órdenes? Lo vamos a reflexionar. Ciertamente que los problemas afectan la credibilidad, pero por otro lado pueden ser un camino para fundamentar mejor nuestra fe. La fe es en Jesucristo, en su persona. Los que seguimos a Jesús somos personas frágiles, lo fundamental es que a través de estas situaciones que nos duelen, intensifiquemos nuestro propósito de seguir más fielmente a Cristo y ser anunciadores más creíbles de su vida y de su verdad. ¿Qué opinión le merece la baja de católicos que constata la encuesta Bicentenario Adimark? Vivimos en un mundo secularizado, y lo que está aumentando es esa expresión secularista de nuestra sociedad; es un desafío enorme para la Iglesia evangelizar en tiempos de cambio. La iglesia ha debido evangelizar en tiempos de cambio desde su comienzo, pasando de una cultura propia de Israel a la cultura greco romana; también en el renacimiento, en la época preindustrial; y hoy estamos en un cambio de época muy profundo y el desafío de la Iglesia es justamente ofrecerle a los hombres y mujeres de este tiempo, las razones para vivir y esa es nuestra tarea. ¿Han pensado en estrategias para revertir esta situación? Lo que nos interesa es que la palabra de Dios llegue al mayor número de personas y logre cambiar su existencia adhiriendo profundamente a Dios. La Iglesia acaba de terminar la celebración de un Sínodo, que ha tenido como tema la nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana. Estamos llamados como Iglesia de Chile, obispos, laicos, y las familias también, a esta nueva evangelización, que significa justamente ubicar en el corazón de las personas y en el corazón de la cultura, que tiende a la secularización acentuada, el mensaje liberador del Señor. Y es una tarea que nos entusiasma Fuente: Prensa CECh |
|
Noticias relacionadas:
{module 98} {module 67} |