El sábado, 10 de noviembre la Sección de Turín de la Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Salesiana celebra el 75 aniversario de su fundación con un convenio dedicado a una de las personalidades más significativas que han trabajado en ella: el Venerable don José Quadrio. Al convenio está prevista la asistencia del Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Tarcisio Bertone, ex alumno de la facultad, que al final de la mañana bendecirá el sepulcro nuevo, en el que reposarán los restos del Venerable en la iglesia pública del instituto. En 2013 se cumple el 50 º aniversario de la muerte del Venerable Padre Quadrio (1921-1963). Las celebraciones de este aniversario comenzaron el domingo 21 de octubre en Vervio, el lugar de nacimiento del salesiano sacerdote. En el Salón del consejo se celebró una reunión informal de la asociación “Amigos de don Quadrio” animada por el padre Pierluigi Cameroni, Postulador General, a fin de promover la causa y coordinar algunas iniciativas concretas encaminadas a difundir el conocimiento y la imitación de los modelos de santidad florecidos en estas tierras, con don Quadrio, don Carlos Braga y sor María Troncatti, próxima beata. A continuación, don Luigi Testa, director del Instituto Internacional de Turín Crocetta, presidió una Eucaristía concelebrada por don Gianluca Dei Cas, Arcipreste de Mazzo y párroco de Vervio, don Andrea Bozzolo, Decano de la Facultad de Teología de la Crocetta, y muchos sacerdotes llegados de Roma, Turín y parroquias cercanas. La espiritualidad del Venerable don Quadrio se resume en el lema que ha guiado toda su vida: “Docibilis a Spiritu Sancto” Él eligió este lema como su nuevo nombre en la Pentecostés del domingo 28 de mayo de 1944, mientras se preparaba a su ordenación sacerdotal, entregándose por completo al Espíritu Santo como guía y maestro interior. Esto le permitió irradiar a su alrededor alegría, confianza y esperanza y convertirse en una sonrisa de Dios para todos aquellos que se le acercaban, desde los niños de la calle con los que trabajó en Roma a los clérigos salesianos a la que dedicó la mejor parte de su energías. En este Año de la fe, su vida dedicada totalmente al servicio del Evangelio y a la reflexión rigurosa sobre la fe que es la teología, constituye un buen ejemplo al que mirar. Fuente: InfoANS |
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