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Salesianos laicos y consagrados de todo el país, con diferentes servicios de animación educativo y pastoral, iniciaron un trabajo formativo en el ámbito de Acompañamiento Espiritual, experiencia animada por el sacerdote jesuita Larry Yévenes. Esta iniciativa es organizada por el Instituto de Pastoral Juvenil que la Congregación está implementado en conjunto con la Universidad Católica Silva Henríquez (UCSH). La primera sesión se llevó a cabo el viernes 19 de junio en Casa Inspectorial. El P. Yévenes explicó a OFISA que el trabajo consiste, principalmente, en trabajar herramientas que permiten acompañar efectivamente a las personas, descubriendo lo que ayuda y lo que no en el mundo del acompañamiento. “El taller integra espiritualidad y sicología, el mundo de las relaciones de ayuda, de cómo sacar el máximo provecho al diálogo que tiene un agente pastoral con otra persona”, agrega el sacerdote jesuita. Consultado el P. Larry respecto de una definición de acompañamiento, señala: “Es una ayuda prestada por un creyente a otro creyente, para enfrentar su vida en clave cristiana, con los principios del Evangelio y, sobre todo, invitando a que el acompañado encuentre sus propias respuestas a los múltiples desafíos de la vida”. La próxima sesión se llevará a cabo en septiembre próximo. Más del Acompañamiento Entre las primeras ideas desarrolladas en este primer encuentro, el Padre Yévenes destacó la paradoja que se produce entre la importancia del acompañamiento y su poca formalización en las estructuras organizativas “En los organigramas de los colegios e instituciones no está formalizado el rol del acompañante. Hay mucho agente pastoral que dedica horas de su calendario semanal a escuchar personas, pero en realidad ni hablamos de lo que hacemos, ni hacemos colaboración con otros que hacemos los mismo, no hay diálogos de encuentros de acompañantes, ni tampoco se comunica que en el colegio, en la parroquia, sí está este ministerio del acompañamiento espiritual”. ¿Cuáles son los errores más comunes de quienes ejercen este servicio? “Es muy común el enfoque directivo, que el acompañante le diga al otro lo que tiene que hacer. Confundir los planos entre lo espiritual y lo sicológico. Otro error es no tener formación en algunas áreas de teología espiritual, sicología, ciencias humanas, que podrían formar mejor al acompañante. Errores también como adelantarse a lo que el otro me está diciendo, darse el rol de gurú… ‘sé lo que te hace bien, sé lo que te conviene hacer distinto’, sin respetar la libertad de que el acompañado vaya encontrado su ruta”. Consultado el Padre Yévenes respecto de los difíciles momentos vividos por la Iglesia en Chile a partir de la ya por todos conocida experiencia de pseudo dirección y acompañamiento espiritual a jóvenes, indicó que para ello esta formación pretende establecer muy bien el mundo de los límites sicológicos, espirituales y físicos que van en beneficio del acompañado. “Situaciones como estas nos sirven para darnos cuenta que mal usado este ministerio puede dañar mucho”. Instituto de Pastoral Juvenil (IPJ) Esta experiencia formativa es la primera actividad formal organizada por el Instituto de Pastoral Juvenil, organismo en reciente implementación que se inicia según mandato del Capítulo Inspectorial 2013 de la Congregación. Actualmente integran el IPJ el P. Erick Oñate por parte de la Congregación y Marcelo Palominos por parte de la UCSH. Se aloja dentro de la Vicerrectoría de Identidad y Desarrollo de esta casa de estudios (VIDE). El P. Erick explica que el Instituto es una expresión de la Pastoral Juvenil de la Congregación en el mundo universitario, con la idea de lograr una validación académica. Su misión es generar reflexión y formación en pastoral juvenil no sólo para la Congregación, sino que también para el mismo mundo universitario y la Iglesia en Chile. “Es el puente entre el mundo académico, el mundo formativo y el mundo pastoral”, recalca el P. Erick. “En lo venidero –señala el P. Oñate- el instituto levantará otras instancias formativas tales como, cursos para asesores, cursos para animadores, cursos de actualización teológico. Además, está asumiendo aquello que ya existe en el aspecto formativo: Diplomado en PJ y Diplomado en Salesianidad”. Fuente: Oficina de Información Salesiana (OFISA) |
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