Pastoral y Federación de Estudiantes ayudan a familias de Copiapó afectadas por aluvión

Veintiocho estudiantes participaron de los trabajos de voluntariado entre el 08 y 15 de mayo, en la comuna de Paipote.

Diversas respuestas se han producido desde distintos ámbitos e instituciones de Estado y privadas para ir en ayuda de las familias afectadas tras el aluvión que en marzo, afectó al norte de nuestro país. En este contexto, la Dirección de Pastoral Universitaria en conjunto con la Federación de Estudiantes de la UC Silva Henríquez, atendieron el llamado del padre Guido Castagna de la Parroquia Santísima Trinidad, que invitaba a solidarizar y sumarse al trabajo que se estaba desarrollando en Paipote.

La iniciativa estuvo dirigida por el estudiante de Ingeniería Comercial y representante de la Federación de Estudiantes, Paolo Buracchio y por el coordinador de voluntariado de la UCSH, Hugo Herrera, quienes lideraron la comitiva de veintiocho alumnos, que fiel al valor de solidaridad que la Universidad arraiga en toda su comunidad universitaria, realizaron una importante muestra de compromiso y esfuerzo durante una semana. 

“Pese al tiempo transcurrido, aún persisten diversas necesidades. No en todos los lugares hay agua potable; no todos los niños y niñas están en clases; muchas familias todavía tienen barro en sus casas y viven en deplorables situaciones”, indicó Hugo Herrera.

Algunas de las acciones realizadas fueron: la limpieza del barro de viviendas y de la escuela del sector; la entrega de atención psicológica y de salud a las familias, así como también, el desarrollo de actividades recreativas para los menores de la zona.

Según señaló, Hugo Herrera, “existe el compromiso de volver a Paipote para continuar con el trabajo dadas las necesidades que aún presenta la comunidad, sin embargo, es un proyecto que está en conversaciones entre la Dirección de pastoral, la Federación de Estudiantes y analizar la gestión de los recursos, dado el  alto costo de la iniciativa” finalizó.

Voluntariado en detalle

1. 25 hogares se vieron beneficiados con trabajos de limpieza de escombros, retiro de barro (interior y exterior), armado de camas y arreglos de techumbre.

2. Se realizó la limpieza de la escuela del lugar, contribuyendo así, a que las clases se iniciaran lo antes posible, lo que a su vez, se traduce en la posibilidad que los menores puedan optar a colaciones otorgadas por JUNAEB.

3. 20 toneladas de agua envasada entregadas.

4. Desarrollo de actividades recreativas para un total de 80 niños, las que culminaron con una fiesta. En tanto que la Federación de Estudiantes se dedicó a motivar  como monitores a algunos adolescentes del sector, con el fin de mantener el trabajo recreativo, durante una semana.

5. La atención de salud menor a personas que habían sufrido lesiones de diversa gravedad, en especial al adulto mayor, es otro de los trabajos valorados por la comunidad.

Fuente: ucsh.cl