Asamblea Inspectorial – Rediseño, una oportunidad histórica

En este segundo día de Asamblea Inspectorial, jueves 3 de octubre, los participantes han continuado abordando el tema del Rediseño, trabajo iniciado en la tarde del miércoles, ahora desde una reflexión de la Teología de los tiempos.

En esta reflexión de carácter teológico, el salesiano Christian Guzmán, miembro de la comisión del Rediseño, condujo el momento, profundizando con un documento preparado especialmente, construido en base a la Escritura, al Magisterio de la Iglesia y de la Congregación y a realidades que vive actualmente el país.

Posterior a la presentación de Christian, los participantes nuevamente se reunieron en grupo para analizar elementos particulares de los signos de los tiempos de la realidad nacional.

Plan Formativo Conjunto y Autoevaluación

Previo a la reflexión teológica del Rediseño, fueron presentados dos procesos ya activados en la Inspectoría: uno es la construcción de una propuesta formativa conjunta entre religiosos y laicos, para lo cual el P. Carlo Lira dio a conocer el marco conceptual, y sobre el cual se dialogó en Asamblea. Además, el P. Galvarino Jofré presentó el trabajo de Autoevaluación que se quiere iniciar en la Inspectoría, dando a conocer los criterios y el itinerario de trabajo.

Conclusión Trabajo PEPSI

Durante la primera parte de la tarde del miércoles, primer día de Asamblea, los participantes realizaron un plenario para exponer las reflexiones e intercambios grupales en relación a las propuestas de proyectos para los ámbitos y ambientes de la Misión Salesiana en el país, trabajo que tiende a la definición del Proyecto Educativo Pastoral Salesiano Inspectorial (PEPSI).

Ambientes:

–          Escuela
–          Universidad
–          Oratorios y Centros Juveniles
–          Parroquias y Santuarios
–          Nuevas Fronteras

Ámbitos

–          Movimiento Juvenil Salesiano
–          Evangelización y catequesis
–          Animación Misionera y Voluntariado
–          Animación Vocacional
–          Animación Familiar

Luego de la exposición de los secretarios de cada grupo en plenario, se generó un rico diálogo abierto sobre las propuestas y se hicieron sugerencias de modificación de las mismas sobre aspectos que atienden tanto a la forma como al fondo.

Rediseño, una oportunidad

Concluida el trabajo sobre el PEPSI, se inició el trabajo sobre el Rediseño durante la segunda parte de la tarde del miércoles, para lo cual el P. David Albornoz presentó el itinerario recorrido por la Inspectoría en este tema y el trabajo propuesto para la Asamblea.

El P. Albornoz comenzó explicando el marco en que se ha ido desarrollando el discernimiento, basado, entre otras referencias y documentos, en la carta del Rector Mayor del 24 de enero de 2012, en la que textualmente decía: “La Inspectoría debe seguir tomando importantes decisiones de gobierno en los próximos años para recolocar las presencias y comunidades de forma que se pueda responder mejor a los retos de la misión salesiana. No veo posible seguir con el mismo número de casas y con comunidades muy reducidas; el número de salesianos y la edad media avanzada reclaman ajustes en las obras y concentración de fuerzas” (Carta Rector Mayor de 24 enero 2012).

El P. Albornoz aclaró que los criterios con que se está estudiando el Rediseño han sido tratados y reflexionados en variadas oportunidades, lo que ha resultado en la definición de los siguientes aspectos fundamentales:

–          La persona de los salesianos,
–          la calidad de la vida fraterna de los sdb, su identidad de consagrados,
–          la relación sdb-laicos,
–          las propuestas específicas de formación,
–          la animación y gobierno de los procesos a nivel inspectorial y local,
–          las exigencias de las nuevas fronteras
–          y la calidad educativa y pastoral.

El P. David puso énfasis en que el Rediseño es una tarea prioritaria en la Inspectoría y que es una oportunidad histórica para realizarlo, ya que se está a tiempo para hacer un discernimiento tranquilo y sin apuros. Agregó que el Inspector ha convocado un “equipo de reflexión para el rediseño”, compuesto por los salesianos Galvarino Jofré, Juan Bustamante, Walter Jara, Erick Oñate, Christian Guzmán y David Albornoz.

Cifras de la Inspectoría

Luego, como una manera de ir reflexionando sobre los datos específicos que han iluminado este proceso, el P. Galvarino Jofré presentó las estadísticas que se han ido logrando en este estudio, cuyas cifras hablan por sí mismas, y ofrecen algunas claves de interpretación.

La mirada a los 12 últimos años dice que los salesianos de esta Inspectoría han disminuido en cerca de un 30%, pero a su vez han aumentado las presencias, es decir, ha aumentado el trabajo.

Actualmente, año 2013, los salesianos en Chile son 138, de los cuales 50 (36%) se ubica en un rango de edad que va desde los 71 a los 95 años.

Las comunidades religiosas en 2001 alcanzaban a 30, hoy son 25, para atender a un promedio de 25.603 alumnos en 22 colegios.

Hay 2.048 laicos trabajando en las presencias, más unos 500 de la UCSH.

Laicos que trabajan y están a cargo de la pastoral en las presencias salesianas son 24.

Datos a considerar que entregó el P. Galvarino: la Inspectoría se ha ido repensando y ha ido viviendo procesos que han permitido reorganizarse para prestar servicio de la mejor manera: hay que visualizarse de aquí a los años que vienen, tomando en cuenta los números y realizando una buena reflexión, porque los padres de familia, siguen confiando la educación de sus hijos a los salesianos.

Se ha llegado a formar colegios mixtos y subvencionados, pero hay que pensar cómo creativamente seguir trabajando en comunidad de consagrados, pensando en los destinatarios que son los ambientes populares. Hay una gran corresponsabilidad con los laicos, en un ambiente de vulnerabilidad que alcanza en sectores a un 70%.

En el momento se ofreció la posibilidad de un intercambio de impresiones, a lo que el P. Walter Jara, director del Posnoviciado-Teologado -quien ya vivió un proceso de rediseño en Paraguay como Inspector- opinó que el rediseño tiene que abrirse mucho más: crear condiciones para vivir una vida religiosa feliz, más fecunda, más profética, para que los laicos vivan como buenos laicos. “El reclamo es la calidad de nuestras vidas como salesiano, dijo, y hay que pensar cómo este rediseño ayudará a darle una mayor calidad a la vida fraterna. Los nuevos salesianos reclaman otra manera de vida comunitaria, no ser gestores de obras, para ello no es necesario hacerse salesiano. Hay que abrir la mentalidad”, finalizó.

Por último, el P. Galvarino Jofré volvió a insistir en que las tres variables que hay que conjugar para lograr un buen rediseño, son la realidad de los consagrados, la fraternidad y vida comunitaria y la misión.

Fuente: Oficina de Información Salesiana – OFISA