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Cerca de 35 jóvenes, entre ellos líderes, dirigentes estudiantiles e integrantes de pastoral de los cinco colegios salesianos de Santiago que imparten educación media, visitaron tres centros de la Fundación Don Bosco, el 26 de julio, dedicados a la atención de adolescentes, jóvenes y adultos en situación de calle y rehabilitación en drogas. Se trata de una actividad que surge en la Pastoral Juvenil Inspectorial en 2011-señala su Secretario Ejecutivo Pedro Lastra-, que no se pudo realizar por los distintos movimientos sociales. El objetivo es acercar a los integrantes de las comunidades educativas salesianas a la realidad de la Fundación y al valioso trabajo que desempeñan. La jornada se inició en Casa Inspectorial con la motivación y estímulo del P. Inspector Alberto Lorenzzelli, de Pedro Lastra y de Sergio Mercado, Director Ejecutivo de la Fundación Don Bosco. Posteriormente los muchachos visitaron en PEC Santiago, casa de acogida diurna del centro de la ciudad que atiende a adolescentes y jóvenes en situación de calle; luego la Casa Don Bosco Acoge en la comuna de La Florida donde un grupo de jóvenes realizan un proceso de rehabilitación social en régimen interno; finalmente la casa Valdocco en la comuna de Lo Espero, para jóvenes y adultos que se rahabilitan del consumo de drogas. Visibilizar la pobreza El P. Luis Flores, Capellán de la Fundación, comenta que la experiencia ha servido mucho para ayudar a los muchachos a visibilizar la pobreza y a los pobres. “En general nuestros chiquillos no conocen el mundo de los pobres. Saben que existe, pero no lo conocen, no han tenido contacto directo con ellos. Entonces la pobreza y los pobres para ellos son invisibles, no existen. Visivilizarlos, mostrarlos y hacerles ver a los chiquillos que son personas igual que ellos pero con diferentes oportunidades, les hace cuestionar”. En cuanto a los tres centros, el P. Luis comenta que Valdocco, la casa de rehabilitación en drogas, fue el que les impactó más. “Yo creo que se tienen que haber proyectado a futuro, habrán visto que algunos de ellos tendrán las edades de sus papás. Los chiquillos ahí se dieron cuenta de que caer en las drogas tiene que ver mucho con la realidad familiar y social en la que vives y que de alguna manera son privilegiados. El contacto con este mundo, en primera instancia, les hace valorar lo que ellos tienen y, en segundo lugar, despierta en algunos sentimientos de solidaridad”. Testimonios El Centro de Estudiantes del Colegio El Patrocinio de San José manifestó como satisfactoria la experiencia. “Pudimos conocer otras realidades que para algunos solo la habían oído o visto por televisión. Dentro de este ‘viaje’ el estudiante se pudo dar cuenta que debe valorar lo que tiene y hacer el esfuerzo como alumnos salesianos de poder colaborar con esta Fundación. Nos gustaría que este tipo de encuentros se pudieran seguir haciendo para poder invitar a más jóvenes”. Matías Villalobos, alumno de primero medio del Liceo Camilo Ortúzar Montt, manifestó su agradecimiento por la oportunidad brindada. “La experiencia nos ayudó a comprender distintas realidades que no están muy ajenas a la rutina diaria. Nos ayudó a apreciar las cosas simples. Las realidades vistas ayudan a comprender que la gente puede cambiar y ‘levantarse’ para ser mejor. La gente que estaba en los hogares nos dieron consejos y nos demostraron que es necesaria la voluntad para superar los obstáculos”. Fuente: Oficina de Información Salesiana – OFISA. Noticias relacionadas:
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