El Santuario de María Auxiliadora de Punta Arenas, patrona de la Congregación Salesiana y de la ciudad, fue el escenario para un evento poco frecuente en esta australes tierras: la ordenación de un sacerdote salesiano, Claudio Cartes. La más reciente fue la del P. Carlos Ampuero, actual director de salesianos de Puerto Natales, el 6 de mayo de 1994.
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Claudio Cartes Andrades recibió el Orden Sacerdotal el sábado 5 de noviembre, por imposición de manos del Obispo de Punta Arenas, Monseñor Bernardo Bastres Florence, quien destacó la generosidad de Claudio de dar el Sí al Señor, acompañado por la comunidad educativo pastoral a la que ha estado dedicado este último año: el Liceo San José, y en general por la comunidad puntarenense.
La Eucaristía, en un templo repleto, fue concelebrada por el P. José Miguel Núñez, Consejero General de la Congregación, de visita en Chile; por el P. Inspector Leonardo Santibáñez y miembros del Consejo Inspectorial, salesianos llegados de otras presencias salesianas del país y sacerdotes de la diócesis local.
Se congregaron en el templo familiares y amigos de Claudio, llegados no sólo desde Talca, su ciudad de origen, sino que también del resto del país; Hijas de María Auxiliadora, hermanas clarisas y vicentinas, sus hermanos de formación inicial, autoridades civiles de la ciudad, como el senador Carlos Bianchi, y aquellos nuevos amigos hechos durante este año en Punta Arenas, para pedir al Señor que le regale al nuevo sacerdote un corazón grande capaz de amar y servir a quienes sea enviado, con el mismo amor y entrega de Jesús.
Claudio nació en Concepción el 7 de junio de 1983. Hijo de Robinson y Elsa, es el menor de dos hermanos. Su niñez y adolescencia, junto a su hermano mayor Roberto Antonio, la vivió en Talca. En el seno familiar recibió la educación 
cristiana que le llevaría a profundizar siempre más su amistad con Jesucristo. Hizo su primera Profesión religiosa el 30 de enero de 2003, en el Templo del Noviciado en Macul, Santiago.
Durante su formación se ha desempeñado en diversos servicios pastorales: en el colegio “El Patrocinio San José”; en el Programa Don Bosco a favor de los niños de la calle; en la Escuela Agrícola Salesiana de Catemu; en el Equipo nacional de Animación de las Comunidades Apostólicas Salesianas; en el Equipo Inspectorial de Pastoral Vocacional; en la Parroquia Jesús el Señor, de la Florida, Santiago. El 11 de septiembre de 2010, fue ordenado diácono por el nuncio apostólico Giuseppe Pinto.
Claudio escogió como lema sacerdotal: “Que creamos en Jesucristo, y nos amemos unos a otros, como Él nos amó” (1 Jn 3, 23), lectura que fue proclamada en el Evangelio de la celebración.
Homilía
Durante su homilía, el Obispo se dirigió al neo sacerdote haciéndole ver el desafío que significa el pastoreo en estos tiempos: “Querido hermano, tu sacerdocio lo vivirás en este tiempo, con sus desafíos, sus esperanzas y sus grandes oportunidades. Como buenos hijos de Don Bosco no nos “lamentamos del tiempo que nos corresponde vivir”, al contrario, reconocemos en él, el paso de Dios y la mejor oportunidad para entregar nuestro testimonio y ayudar así a construir con nuestro trabajo y entrega el Reino de Dios”; señaló.
El Pastor Diocesano agregó luego algunos aspectos que los mismos fieles de Magallanes dijeron buscar en la Iglesia, dentro de los que destacó al sacerdote como Sacramento de la Presencia: “nuestros fieles nos demandan estar presentes” dijo, a lo que agregó que el Pueblo de Dios quiere a su sacerdote presente en las fiestas y en los días tristes, una presencia sin apuros, sin afán de protagonismo, compartiendo de igual a igual con ellos. Esa presencia con humildad, con alegría, con esperanza y de gratuidad.
En su palabra de Pastor, el Obispo Bastres dio a Claudio algunos consejos basados en su experiencia: “Con los años, he descubierto, que el sacerdote no necesita hablar mucho, no necesita tener todas las respuestas, necesita estar, como el Señor. Ser como el faro silencioso que 
con su iluminar ayuda a tantos a encontrar el camino de salvación. Nuestros fieles, Claudio, nos solicitan que seamos acogedores y bondadosos. Que imitemos a Jesús, cuando acoge a Zaqueo, abraza a la Magdalena, sonríe a Pedro, consuela a Jairo, confía en Marta y María”, señaló el P. Bernardo.
“Por último, dijo el Obispo, algo que nos han dicho los fieles y que lo dice la experiencia de vida. En el camino que hoy emprendes, al igual que en el Sacramento del Matrimonio, surgirán los problemas y las dificultades. En ese momento busca la ayuda y el consejo de los amigos y hermanos sacerdotes, y no temas acudir con verdad y libertad. Los momentos de dificultad, incomprensión y soledad, son los momentos más ricos de Dios, en ellos el Señor, al igual que el viñador, poda, corta, purifica y hace surgir nueva vida, que alimentará mejor a los que acudan a ti”.
Agregó finalmente mons. Bastres: “Serás Sacerdote durante todo el día, y el pueblo de Dios te demandará tu disponibilidad y servicio. Pues tu consagración no es un privilegio, sino una gran capacidad de libertad para amar y servir a su pueblo, por ello, que la promesa de celibato que has realizado en el Diaconado te hace libre para amar a todos, la pobreza evangélica que te invita el Maestro de Galilea es para dar testimonio del desapego de las cosas materiales. La Obediencia prometida te hace plenamente libre para el servicio de la Iglesia”.
Agradecimientos
Al final de la ceremonia, El P. Claudio agradeció a Dios por ponerlo en este camino y por el regalo más grande que puede hacernos, que es sentirnos amados por Él y unos a otros; a su familia, por darle los valores cristianos; a sus amigos, que llegando de tan variados lugares, hicieron posible que este día fuera tan significativo para él; y a los jóvenes presentes, a los que deseó fueran felices como Dios quiere que sean.
Luego de un coctail en dependencias del Instituto Don Bosco de Punta Arenas, el P. Claudio fue escoltado por las calles de la ciudad por la banda de guerra del Liceo San José y jóvenes con banderas y globos, hasta llegar al almuerzo que compartió con sus más cercanos.
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Fuente: Área de comunicaciones.
