Durante la jornada de este martes 27 de septiembre, el Consejero General de la Congregación, P. José Miguel Núñez, está participando en un encuentro con los Directores de las Comunidades Salesianas del país, que tiene por objeto el trabajo en cuatro temas: Rol del director, visión del director acerca de la Inspectoría, debate nacional sobre la educación y mirada en clave económica a un posible cambio de legislación para las escuelas.
A pocos días de cumplir un mes en Chile realizando la Visita Extraordinaria a la Inspectoría, el P. José Miguel Núñez compartió con OFISA algunas impresiones del trabajo que está realizando este martes con los Directores, y también de lo que ha sido su paso por las diez comunidades que ha conocido: cuatro del norte y extremo del norte del país, y la seis restantes de la zona central.
Respecto del trabajo particular con los Directores, el P. Núñez explica que los dos primeros temas están siendo abordados durante la mañana. En cuanto al rol del Director, la idea es reflexionar sobre la animación de una comunidad educativo pastoral, las dificultades que están encontrando, la respuesta de los hermanos a esta tarea de animación, expectativas, retos y dificultades.
Respecto del trabajo de la tarde, en cuanto al tema del debate nacional sobre la educación, la idea es también analizar problemas, dificultades, expectativas, situaciones que se viven en nuestros colegios y criterios a adoptar frente a esta situación.
El segundo tema de la tarde abordará cuestiones económicas frente al posible cambio de legislación en las escuelas: alternativas, propuestas, hacia dónde caminar en clave económica.
“Estoy muy satisfecho y contento de las presencias salesianas”
Consultado de lo que ha significado hasta ahora su visita en Chile, comenta: “Me siento muy agradecido por la acogida, la amabilidad, por cómo los hermanos están disponibles. Me estoy sintiendo muy bien en todas partes, con una acogida espléndida, con signos de fraternidad”.
En cuanto a la realidad de la Congregación en el país, comenta: “Me he encontrado con realidades salesianas muy bonitas. Estoy muy satisfecho y contento de las presencias salesianas, con un claro estilo salesiano, con hondas raíces, con un proyecto educativo pastoral normalmente bien estructurado y armado, con un montón de personas laicas trabajando comprometidas codo a codo con los salesianos en el proyecto, y en general, con destinatarios con un perfil muy cercano a lo que es el estilo salesiano.
Veo un ambiente muy positivo, en la mayoría de los casos, entre los chicos, que reconocen el trabajo que se está haciendo con ellos, el estilo de educación, el proyecto. Desde ese punto de vista, los actores: profesores, alumnos, apoderados con una apreciación muy positiva del trabajo que se está llevando adelante en las casas.
Naturalmente soy consciente también de los problemas y las dificultades que está viviendo la Inspectoría y que voy descubriendo poco a poco. Son retos que debemos afrontar y que lo haremos con la decisión necesaria y con la disponibilidad para sumar al esfuerzo que la Inspectoría está haciendo”.
Fuente: OFISA.