JMJ: Tercer Reporte P. Zura

2208_01.jpgEl sábado 20 de agosto, día previo a la ceremonia conclusiva de la Jornada Mundial de la Juventud, el P. Juan Carlos Zura envió un tercer reporte de lo que hasta ese momento vivía junto a los integrantes del Movimiento Juvenil Salesiano en Madrid. En esta oportunidad destaca la gran acogida al Papa por parte de los peregrinos y del pueblo español y algunas actividades significativas como el encuentro de profesores y el Vía Crucis.

CÓMO ESTÁN VIENDO LA VISITA DEL PAPA A MADRID ALGUNOS DESTACADOS
COPROTAGONISTAS
“El Papa está muy emocionado con esta JMJ”, ha dicho Federico
Lombardi, portavoz del Vaticano.

El encuentro con profesores y el Vía Crucis con pasos de la Semana Santa española, dos de los momentos más memorables.

Madrid, 19 de agosto de 2011.- “El Papa está emocionado y muy contento”. Han sido las palabras de Federico Lombardi, portavoz del Vaticano, ante la pregunta de qué balance hacer de esta primera parte de la JMJ de Madrid.

Lombardi ha explicado que las Jornadas Mundiales de la Juventud tienen una continuidad, pero también posibilidades nuevas: “De la JMJ de Madrid creo que se recordará durante mucho tiempo el encuentro de profesores que ha tenido el Papa y el impresionante Vía Crucis, muestra evidente de la tradición cultural y espiritual de España”.

Uno de los momentos que se recordarán por mucho tiempo de esta JMJ es el Vía Crucis, con tallas [“Pasos”] de la Semana Santa Española.

Ante los comentarios de por qué una tercera visita a España ha recalcado que “hay que considerar que dos de ellas eran dos grandes eventos a nivel mundial, que España acogió en su sede. Sólo la visita a Santiago y Barcelona eran una visita propiamente a este país”.

Una acogida entusiasta

Por su parte, Yago de la Cierva, director ejecutivo ha resaltado que “el éxito de las Jornadas Mundiales de la Juventud no está en los números”. A pesar de esto, ha subrayado que están muy impresionados por la acogida tan entusiasta que está teniendo el Santo Padre en la ciudad de Madrid: “antes de llegar a la plaza de Cibeles para su bienvenida, miles de personas le habían visto a lo largo de todo el recorrido del Papamóvil”.

Añadió que el jefe de Policía le había comentado: “nunca hemos visto recibir a una persona con tanto afecto y cariño. Son muchos miles los que están en todos los recorridos. Es impresionante, más si cabe, si consideramos que es mucho más fácil congregar a gente para una protesta, cuando la gente está enfadada; que para una fiesta, para dar la bienvenida y las gracias”.

HORAS DE SACRIFICIO Y FERVOR, DE MEDITACIÓN PROFUNDA E INVENCIBLE
ALEGRÍA


Efectivamente, aparece como un hecho sorprendente que en una sociedad española que los medios nos hacen ver tan secularista e increyente y en una Iglesia Católica europea aparentemente tan poco creíble e irrelevante para las personas concretas y para las raíces de la identidad de este continente, el Papa suscite una acogida tan cálida como multitudinaria. A los centenares de miles de jóvenes de todo el mundo se han unido millares de familias de la ciudad y de fuera para darle la bienvenida y escucharlo. El primer encuentro en Cibeles fue un intercambio de afecto y simpatía entre una Papa feliz y sencillo y una expresiva y alegre multitud.

Las religiosas sobre todo jóvenes y también las de clausura, han tenido un encuentro exclusivo e íntimo con el Papa Benedicto en el inigualable escenario del Escorial. También el mundo de la cultura, representado por miles de académicos, en su mayoría menores de 40 años, se reunió en torno a este maestro insigne e intelectual extraordinario que cuenta ante sus “colegas” con un prestigio y una autoridad de las más respetables. Una doble muestra atrajo el interés de esta que se declara “la juventud del papa” o, para los críticos, de esta multitud de jóvenes “fundamentalistas católicos”, fue la atractiva feria vocacional de los más variados carismas (atendida “por sus propios dueños”) y la exposición mediática de la obra genial de Gaudí.

El Vía Crucis de ayer viernes fue, desde mi punto de vista, de lo más logrado y mejor organizado hasta ahora. Los “pasos” venidos de Sevilla, Málaga otras ciudades y del mismo Madrid, nunca antes fueron expuestos en un tiempo de verano y con los centenares de miembros de las respectivas cofradías de cada una de las maravillosas imágenes, vestidos según el estilo acostumbrado por ellos, desde la tradicional instalación (la “madrugá”) hacia las 4 de la mañana, hasta su regreso a sus sedes provisionales en la ciudad a partir de las 22.30 de anoche.

La actitud orante del Papa, el seguimiento atento (en directo y en el Manual del Peregrino) de las breves reflexiones preparadas por unas religiosas, la contemplación de las bellísimas imágenes en vivo o por las numerosas pantallas (con 4 traductores en lenguaje para sordos más otros dispuestos ante grupos más pequeños de estos hermanos minusválidos), el cargar la cruz por turnos por grupos representativos de múltiples realidades del dolor y el sufrimiento de la actual generación juvenil en todo el mundo, crearon un ambiente de profunda meditación sobre la pasión redentora de Cristo hoy reproducido en el malestar, la marginación, la explotación, la cesantía y otras tantas situaciones de dolor especialmente de los jóvenes. Hasta muy tarde continuó el acompañamiento de los pasos en su retiro que es otro momento de impresionante ceremonial protagonizado por los cofrades de toda edad y condición.

De hecho los jóvenes están cenando en los bares y restaurantes predispuestos y regresando a sus lugares de descanso no antes de la medianoche o de las primeras horas del amanecer. Las incomodidades de los traslados, del calor, de los desvíos de recorrido por las medidas de seguridad estricta de los miles de policías apostados por doquier, de las aglomeraciones en el metro, de algún insulto gratuito o de uno que otro gesto de abierta indiferencia, de burla o desprecio, del suelo como lugar de acomodación en los eventos y de reposo nocturno, ya han sido asumidas como un precio a pagar por esta experiencia incomparable y de múltiples significados para cada uno, para este país, para este continente hoy ya no solo blanco sino multicolor y multirracial, y para la Iglesia local y universal.

Hoy nos vamos a la Vigilia ya la Misa de envío en “Cuatro Vientos”.

P. Juan C. Zura, sdb.
Madrid, 20 de agosto de 2011.

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