El lunes 16 de agosto, Día del Natalicio de Don Bosco, fue inaugurada la XXVI Jornada Mundial de la Juventud en España. Más de 500 mil jóvenes abarrotaron la Plaza de Cibeles en la Misa de apertura, entre ellos, los poco más de 2 mil peregrinos chilenos y el centenar de las obras salesianas de Chile. Desde Madrid, el P. Juan Carlos Zura comparte su experiencia de esta primera jornada.
Mensaje P. Juan Carlos Zura:
¡Ya estamos en Madrid! Después de haber sido enviados por el Obispo de San Sebastián en la hermosa catedral del Buen Pastor, hemos llegado al caluroso Madrid (35/38 grados) a participar gozosos en la JMJ Madrid 2011. Ayer por la tarde fuimos convocados y recibidos por el Cardenal Rouco Varela en la Plaza de Cibeles: he escuchado que se reunieron ya 500 mil jóvenes en esta primera celebración oficial.
La experiencia es sacrificada por las condiciones en que se aloja y por las elevadas temperaturas. Pero todo es superado por el ánimo y la fuerza incontrarrestable de los jóvenes de múltiples países, razas, colores, vestimentas y cuyas características más notables y comunes son la alegría permanente, la abierta manifestación de la fe y la incondicional acogida hacia los demás. Son alegres, diversos, comunicativos y espontáneos. Han venido acompañados por muchos sacerdotes, seminaristas, religiosas y asesores laicos.
También la excelente organización y la múltiple oferta de informaciones, de materiales, de souvenirs hacen de este evento mundial un encuentro de persona a persona y de comunidades a nivel humano y fraterno. No ha habido mayores contratiempos (sólo retraso por pinchazos en los neumáticos en algún bus como el nuestro, algún desmayo y poco más que eso).
Los ciudadanos comunes de Madrid saludan espontáneamente y con simpatía; algunos medios están cubriendo todo y de modo objetivo y hasta entusiasta; cierto es que también se escuchan puntos de vista críticos (frente a la JMJ, a la Iglesia, al Papa, etc.), pero es lo esperable en esta sociedad tan satisfecha como preocupada ahora por la crisis económica que les está llegando a afectar el bolsillo y incomodar en el día a día. También el hecho de que muchísima gente esté en vacaciones ayuda a que la ciudad esté sólo copada por los peregrinos y turistas y la movilización sea más expedita.
Un mensaje claro del Obispo en San Sebastián: “Jóvenes, confíen su pasado a la misericordia de Dios, su futuro a su providencia y su presente a Jesús que los ama”. El Cardenal Rouco ha recordado la todavía muy atrayente figura del Beato Juan Pablo II y también ha invitado a los jóvenes a acoger a Benedicto XVI con amor de hijos, recordándoles que él ha dicho que “Cristo no pide nada y lo da todo”.
Por cierto, los chilenos se destacan por lo bulliciosos, sus gritos de CHI-CHICHI-ELE- EH! y sus numerosas banderas; se hacen notar tanto o más que los italianos, que son muchos, y los mismos españoles, que en verdad, podrían haber sido más, porque en el norte eran en verdad muy pocos y acá sí se han convocado un poco más… muchos están en vacaciones, en las fiestas de temporada y en los “botellones” de alta madrugada.
Hoy nos vamos de fiesta nosotros los SALESIANOS en Atocha. Ya les contaré!
Agurk= Saludos en vasco!
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