Nuevo Estatuto Antiguos Alumnos

0707_13.jpgCon una carta fechada el 24 de junio, el Rector Mayor, P. Pascual Chávez, entregó oficialmente el nuevo Estatuto a los miembros de la Confederación Mundial de los Antiguos Alumnos de Don Bosco.

Al presentar el documento, fruto de un largo camino y aprobado “ad experimentum”, el IX Sucesor de Don Bosco exhorta a los Antiguos Alumnos para un mejor trabajo en la sociedad, en la iglesia y en la Familia Salesiana.

En el onomástico de Don Bosco y Fiesta del Rector Mayor se concluyó oficialmente el largo camino de revisión del Estatuto de la Confederación Mundial, que este año celebra el centenario de su fundación; “una coincidencia providencial y muy significativa”, subrayó el P. Pascual en su carta.

El Presidente Mundial de la Confederación, doctor Francesco Muceo, y el Delegado Confederal, P. José Pastor Ramírez, recibieron con gran satisfacción la noticia, mientras se encontraban realizando visita de animación, respectivamente, en España, a la Coruña, y en República Dominicana, en el contexto de los preparativos del Congreso latino Americano que se celebrará en 2013.

El itinerario de la revisión del Estatuto se realizó durante el curso de la Asamblea Mundial Electiva, llevada a cabo en el Salesianum de Roma, del 30 de septiembre al 3 de octubre de 2010. La carta de presentación y entrega del Rector Mayor ratifica la aprobación.

“En este momento la Sociedad, la Iglesia y la Familia Salesiana les pide tener cercano al corazón y defender a toda costa determinados valores con empeño social, político y económico; de modo especial los valores de la vida, de la libertad y de la verdad. – escribe el Rector Mayor – Ustedes, están llamados a desarrollar la misión como laicos con competencia profesional, con conciencia moral y con empeño social”.

“Don Bosco los llama una vez más a ser ‘buenos cristianos y honestos ciudadanos’; a vivir la solidaridad en la Asociación y fuera de ella, sobre todo con los jóvenes más marginados; a promover la dignidad humana y de la familia; a cuidar de la juventud, sobre todo de aquellos que terminan los procesos educativos en las casas salesianas, para compartir con ellos su identidad y misión en la Asociación; para que puedan profundizar la historia, la pedagogía y la espiritualidad de don Bosco”.

Insistiendo en el valor de la unión, el P. Pascual exhorta a los antiguos alumnos a una profunda formación permanente: “La educación recibida en el pasado no puede permanecer sólo como recuerdo; sino que se debe transformar en una fuerza que mueve el exalumno a incidir en el presente y transformarlo”.

Fuente: InfoANS.