Paulo Henríquez, basquetbolista profesional que hace dos años sufrió un accidente que lo dejó parapléjico, realizó una charla en el Instituto Salesiano de Valdivia el viernes 11 de marzo, en la que dio a conocer parte de las varias experiencias vividas en el deporte y su testimonio de fe y vida.
Un “piquero” mal calculado le produjo a Paulo una fractura cervical que le comprometió la médula, noticia que, en su momento, conmocionó a todo el ambiente del Basquetbol y a toda Valdivia. En su ejercicio como profesional de la Dimayor, representó a los equipos de la Universidad Autónoma, Deportes Valdivia y Deportes Castro.
Invitado por el profesor del taller de Basquetbol del ISV, Paulo compartió un mensaje que buscó incentivar a los estudiantes a continuar en el deporte: “con dedicación y esmero se pueden lograr grandes cosas”, indicó. De su experiencia comentó que el deporte le regaló su beca de estudios universitaria y amigos, entre otras cosas.
En cuanto a su rehabilitación, recordó que en un principio no podía articular palabra, ni mucho menos sostener el cuello y los brazos. Algo tan simple como respirar significaba un desafío.
Un momento de especial emoción fue cuando Paulo se refirió a lo impactante que fue para él conocer a Juan Ignacio Bobadilla y a su padre, en la clínica de rehabilitación de Santiago, alumno del ISV con un cuadro de suma gravedad luego de ser atropellado en 2010. Relató el esfuerzo que vio en el estudiante salesiano para rehabilitarse, proceso que le permitió reintegrarse este año al Colegio para cursar octavo básico .
Paulo enfatizó que el difícil camino de la rehabilitación ha sido posible gracias a la fe, la familia y los amigos, invitando a los presentes a seguir apoyando en la rehabilitación de Juan Ignacio.
Para concluir la visita de Paulo, el ex – Capitán del Club Deportivo Valdivia, Nelson Méndez (Antiguo Alumno Salesiano), acompañó a los profesores Cristian Velásquez y Carlos Zúñiga en una clínica deportiva realizada en el Gimnasio Don Bosco.
