Aunque sólo se trató de una visita de cerca de 20 minutos, el paso de la Virgen del Carmen Misionera y del Evangelio de Chile por la Escuela Industrial Salesiana de La Serena, realizado el miércoles 22 de septiembre, fue preparado y vivido de forma muy significa por la comunidad educativo pastoral.
“Sin duda, Ella quiso visitar nuestra Escuela. Fue un milagro que se dio sorpresivamente”, explicó el P. Hugo Saldaño sobre la visita. La gestión para llevarla a la Casa Salesiana fue realizada por el P. Hugo Strahsburger, logrando generar un pequeño espacio en medio de una agenda que la mantendrá hasta el domingo 26 de septiembre peregrinando por las provincias de Elqui y Limarí.
La misión de la comunidad educativa pastoral de la Casa Salesiana fue escoltar a la Virgen Misionera una vez finalizada la Eucaristía en la Catedral de la ciudad, en su camino por las calles Los Carrera, Peni y Regimiento Coquimbo. A modo de agradecimiento, la Madre Dios visitó la Escuela. Su paso fue anunciado por la Banda Instrumental Don Bosco, el Escuadrón de la Escuela y las diversas experiencias asociativas del Movimiento Juvenil Salesiano.
En el recorrido por las calles, acompañaron a la Virgen alumnos, miembros de la Familia Salesiana y vecinos, quienes la saludaron con pañuelos blancos hasta su ingreso a la Escuela. Los fieles agradecieron los múltiples favores concedidos y realizaron una oración litánica.
Durante la ceremonia al interior de la Escuela Salesiana, el P. Saldaño agradeció a la Virgen su invaluable visita y resaltó su importancia en la vida de todos los miembros de la comunidad. “Esta visita es trascendente. Ella vino a nuestra Escuela para que los alumnos sepan que la Virgen tiene interés en ellos. Por esta razón, ella quiso pasar por aquí, porque quería revivir en todos nosotros la fe por Jesucristo, su hijo, y para que descubran que ella es Madre y mediadora, que siempre estará ahí cuando la necesitemos”.
Concluido el paso por la Escuela, la Virgen fue acompañada hasta la iglesia del Hospital San Juan de Dios, su siguiente parada en su camino de bendiciones y amor por la Región de Coquimbo.