De misionero a misionado… P. Heriberto Cabrera en Mauritius

2301_01.jpgEn diciembre pasado, estuvo de visita en Chile el P. Heriberto Cabrera, misionero salesiano chileno que actualmente desempeña su labor en África, particularmente en la Isla Mauritius. En conversación con OFISA dio a conocer cómo ha continuado su proceso de adaptación en este nuevo lugar de misión, luego de los varios años que estuvo en Madagascar.

A pesar de que le es permitido viajar a Chile por período de dos meses para tomar días de descanso y visitar a su familia, el P. Heriberto sólo hace uso de un mes, porque considera que la cantidad de trabajo que demanda las tres escuelas técnicas en Mauritios, no da para más. Además, continua en su labor como Director de la comunidad religiosa, que ahora se ha reducido a sólo tres integrantes, quienes deben atender el mismo trabajo. Algo positivo ha sido la concreción de una casa para la comunidad, que antes no se tenía.

El P. Heriberto cuenta que también se le ha solicitado al Obispo dejar la administración pastoral de la parroquia que se atendía, para concentrar de mejor manera los esfuerzos en las escuelas. De todos modos, se siguen prestando algunos servicios.

2301_02.jpgDe su proceso de adaptación en Mauritius destaca dos empeños: no volver a Madagascar con tanta frecuencia, puesto que favorece el recuerdo de tantos años de trabajo en la isla, y con ello el dolor por la partida; y hacer todo lo posible por quedarse y adaptarse a Mauritios. Comenta que ambas cosas le han ayudado mucho, así como también su curiosidad, que le hace tomar siempre a bien lo nuevo: comidas, la gente, los modos, la cultura, etc.

Para ejercer su servicio en Mauritius, ha tenido que aceptar la paradoja de vivir en un país extremadamente bonito, donde hay mucha riqueza, pero con gente muy pobre.

En cuanto al trabajo pastoral con los jóvenes, el P. Heriberto comenta que los desafíos son varios, puesto que la dinámica de participación y estructura es muy diferente a lo que se conoce en Chile, lo que requiere, por ejemplo, mayor esfuerzo en la búsqueda de los chiquillos. Se sigue el trabajo con los scouts, único grupo con un programa estructurado.

DIFICULTADES
En cuanto al trabajo en las escuelas, el P. Heriberto se refiere a algunas importantes dificultades que tuvo que enfrentar durante el año: la primera es que finalmente el estado resolvió no reconocer oficialmente los títulos técnicos otorgados por las escuelas salesianas, a pesar de haber ofrecido tal reconocimiento una vez concretados procesos de adaptación y optimización que se alcanzaron luego de invertir gran cantidad de tiempo y recursos. Tal situación, del todo injusta, es catalogada por el P. Heriberto como una gran discriminación hacia los católicos. Ya son 35 años de un no reconocimiento estatal, lo que le impide a los muchachos seguir estudios universitarios, sin embargo, la calidad de los egresados de las casas salesianas es reconocida por las empresas.

2301_03.jpgExplica también que las escuelas no fueron fundadas por los salesianos, por lo tanto, los profesores no fueron elegidos según los criterios propios del carisma. Por ejemplo, hay algunos docentes sin formación profesional, y otros con estudios primarios inconclusos. Lo que es peor, varios de éstos no quieren regularizar o continuar estudios, aunque les paguen los costos. Los profesores están muy protegidos por la ley, por lo que prescindir del servicio de alguno cuando no quiere adaptarse a las exigencias de estilo y calidad de la enseñanza, demanda un proceso larguísimo para la Escuela y muy costoso por la indemnización obligada que se debe pagar. Además, cuenta el P. Heriberto que en algunos docentes es posible percibir incluso un profundo desprecio hacia los jóvenes.

Con todo, el P. Heriberto se ha propuesto trabajar para cambiar cuanto sea posible. En su labor como Director ha exigido que la promoción cristiana sea evidente, no sobreentendida, por lo tanto, se debe manifestar abiertamente que las escuelas son católicas, donde se habla de Jesucristo. “No se obliga a la gente a venir a misa o a practicar, pero de Jesucristo se habla”. También se ha establecido un Bueno Días diario, a pesar de que varios docentes son de otras religiones. Exigió una actividad social para la Cuaresma, participación diocesana durante el año, un paseo con todos los alumnos, y el tratamiento de algún tema para profundizar. Algunas de las temáticas abordadas han sido el sentido de la vida y el aborto, etc.

MISIÓN, UN ITINERARIO
El P. Heriberto manifiesta que los 18 años de Misión que ha podido experimentar le han ayudado a aprender a ser más humilde, puesto que se ve la riqueza de muchas culturas, se logra ver que el propio aporte es importante, pero que es sólo un granito de arena. “En algunas misiones se ven pocos frutos, pero no es nuestro derecho ver frutos, estamos sólo para sembrar algo que no nos pertenece”.

2301_04.jpg“La experiencia misionera se vuelve una experiencia espiritual. La impresión que yo tengo es que mientras más pasan los años, se vuelve un itinerario. Durante los primeros años uno se deja llevar por toda la actividad, por la novedad, que llena los ojos, que llena el corazón, y cuando las cosas se decantan con los años, la Misión se transforma, y creo que eso es bonito porque el misionero pasa a ser misionado”.

“También se aprende a que nunca se termina de dejar todo, por ejemplo, ciertos períodos de la vida Dios te pide dejar hasta la comunidad, como fue el caso nuestro este año que fuimos tan pocos. En la práctica éramos dos. Hay que renunciar a veces a hacer un trabajo para tu Congregación, salesiano cien por ciento, para ponerte al servicio de la Diócesis, de la Iglesia”.

El P. Heriberto concluye con una analogía: “si no es posible prender el fuego, al menos la vela que se quede encendida, para iluminar”, es decir, aunque no se puede seguir realizando algunas actividades, como por ejemplo, su trabajo de investigación en educación del cual resultaron varios libros en los años que estuvo en Madagascar, buscar la manera de enseñar como lo hace en Mauritius, predicando retiros, dando conferencias, escribiendo artículos en para el diario, etc.

NOTICIA RELACIONADA
Experiencia del P. Heriberto Cabrera en la Isla Mauritius