Ocho nuevos diáconos para
Padres, familiares y amigos repletaron el templo y emocionaron a los nuevos diáconos con cariñosos abrazos y manifestaciones de alegría al término de la ceremonia, y transformaron el frío clima de la noche, en un cálido ambiente lleno de buenos augurios para los ordenados.
Al término de la celebración, el P. Inspector Leonardo Santibáñez señaló que la ordenación de estos nuevos ochos diáconos es muy importante para
Durante su homilía, mons. Vargas recordó los orígenes de
El Prelado recordó a los ordenandos que “en el mundo y cultura que vivimos, tan individualista, competitiva e indiferente, una vocación semejante es un hermoso don del Señor y una tremenda urgencia para una Iglesia que anhela ser discípula, misionera y samaritana”.
Les señaló también que la clave de la actitud más adecuada para enfrentar los desafíos que traerá consigo su ministerio, está en lo que han señalado los Obispos de Aparecida y que también es la base de la espiritualidad salesiana: la alegría de ser discípulos y misioneros de Jesucristo.
Finalizada la ceremonia, el Mons. Vargas manifestó a OFISA su satisfacción de poder ordenar un número tan significativo de diáconos para
Agregó que hay una gran similitud entre la misión salesiana y la diaconía: “Ese es el augurio, dijo, y que el Señor ojalá les haga hacer un bonito ejercicio del ministerio y a través de él también vivir al Señor más profundamente en su vida de consagrados”.