Curso de renovación espiritual en El Campello: experiencia del P. Antonio Larraín

3005_01.jpg“Aprendamos a seguir viviendo salesianamente”. Este fue el título del curso intensivo de tres semanas de renovación espiritual en el que participaron los sacerdotes salesianos Antonio Larraín (68) y Roberto Sánchez (77) durante abril y mayo en España. El P. Antonio contó a OFISA que la experiencia fue excelente, muy bien preparada, completa en todos los aspectos y con profesorado de primera línea.

El encuentro se realizó en el centro de formación salesiano El Campello de Alicante, casa que ofrece distintos cursos para los salesianos. Este curso de renovación está destinado a aquellos con 65 o más años de edad y a quienes han cumplido 50 años de profesión religiosa.

Junto al P. Antonio y al P. Roberto participaron 16 salesianos más, sacerdotes y coadjutores procedentes de las Inspectorías del Perú, Colombia, Portugal, Valencia, Sevilla y Madrid.

Explica el P. Antonio que se trata de un curso pedido por las Constituciones Salesianas para el personal maduro de la Congregación que entra en la tercera edad. “Ha sido fantástico en varios aspectos, como en la puesta al día en elementos de tipo teológico pastoral salesiano”, comenta.

Los profesionales que interactuaron con los participantes fueron médicos, sicólogos y sicopedagogos, de los cuales algunos eran sacerdotes salesianos. Al respecto el P. Antonio destaca la profesionalización universitaria de estos salesianos para estar al servicio de la Congregación.

3005_02.jpgFueron muchas las instancias de enriquecimiento y renovación experimentadas, indica el P. Antonio, pero de entre todo destaca los momentos de Leccio Divina, la renovación del espíritu religioso y el viaje a Turín para seguir los primeros pasos de Don Bosco. De esto último le llamó profundamente la atención cómo la mayoría de las casas del norte de Italia mantienen lápidas o diferentes signos que evidencian el paso de Don Bosco por el lugar. Además del viaje destaca el conocimiento de la persona de Mamá Margarita, su importancia en la vida de Don Bosco y de la Congregación.

Estuvieron al corriente y participaron de los importantes momentos de la Inspectoría, como fue la consulta para el nuevo inspector realizada por el Consejero Regional Natale Vitali y de la cual se hicieron parte gracias al correo electrónico, y de los momentos de la Congregación como fue el cierre del Capítulo General 26 gracias a la visita de algunos delegados de las inspectoría españolas.

Hacia el cierre del curso, el director del centro de El Campello, P. Antonio Gil Prieto, sufrió un infarto, razón por la cual le fue pedido al P. Antonio colaborar con aspectos de organización general como la crónica, recopilación de recursos y evaluación. Por tal motivo extendió su permanencia en España hasta el 15 de mayo, lo que le permitió participar en la Novena de María Auxiliadora en Madrid. Arribó a Chile el 24 del mes.

Los recursos de la ciencia y la pastoral moderna entregados, las reflexiones, los momentos de oración, fueron un gran aliciente para continuar con el trabajo y no buscar la jubilación antes de tiempo, cuenta el P. Antonio.

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