Un joven alemán de 18 años llamado Peter von Loewenich llegó a Chile el viernes de la semana pasada para realizar una experiencia de voluntariado durante 11 meses en la Inspectoría, particularmente en el programa Don Bosco Acoge de la Fundación Programa Don Bosco. Su residencia será la comunidad salesiana de Macul.
Hacer el servicio militar o realizar un trabajo social dentro o fuera del país fueron las dos opciones que se le presentaron a Peter en esta etapa de su vida, de las cuales -queda claro- se inclinó por entregarse al servicio de los más desposeídos. Por qué Chile y por qué la Congregación: arguye que vivir una experiencia de servicio fuera le estimula más que lo que podría realizar en Alemania; además, pretendía que fuera un país de lengua castellana y una ciudad grande, y finalmente, confiesa un gusto por el trabajo con los jóvenes, el que ha desarrollado en una parroquia de Colonia. A través de Internet buscó alguna institución para realizar un trabajo social y encontró a la procura Misionera de Bonn. Allí, luego de un tiempo de preparación y de inducción a la realidad social, a la obra salesiana, decidió solicitar permiso a la Inspectoría para integrarse a algún programa.
Peter es oriundo de Essen, localidad cercana a Düsseldorf. Es su primera vez en el continente y cuenta que ha estado en África y Asia. Su manejo del Castellano le permite comunicarse con efectividad y además habla Inglés y Francés. Cuenta que sus padres le apoyaron siempre en la idea de viajar, aunque le manifestaron un poco de pena poco antes de partir. Su núcleo familiar está compuesto además por una hermana de 12 años y otra de 20 que estudia Medicina.
Desde su llegada, el equipo del Voluntariado Inspectorial se ha encargado de inducirlo a la realidad a la cual se enfrentará durante estos meses. Ya ha tenido la oportunidad de conocer poblaciones marginales de la ciudad, que, confiesa, no había visto antes algo parecido. Durante este martes, ha tenido charlas sobre el sistema educativo chileno, la realidad juvenil nacional y sobre la vida de la Inspectoría. Desde el miércoles ya se integrará al trabajo de la casa Don Bosco Acoge en las mañanas, y por las tardes al trabajo de patio Punitaqui. Cuenta Pedro Lastra que la llegada de Peter forma de una opción animada por el quipo del Voluntariado y respaldada por el Inspector y su Consejo a través de un documento que contienen los lineamientos de este trabajo.
