El arzobispo de la Arquidiócesis de Concepción, monseñor Ricardo Ezzati Andrello, asumirá próximamente como el nuevo presidente de la Comisión de Educación y Cultura del CELAM, nominación que recibió como un importante servicio a la Iglesia de América.
La noticia fue confirmada por Mons. Ezzati durante un encuentro fraterno con periodistas de Concepción, señalando que aceptó este nombramiento con mucha modestia, a pesar que tiene grandes tareas por delante en su diócesis. “Es un servicio que se me ha pedido y los servicios siempre se piden y se dan con un corazón abierto”, transmitió con alegría.
Dio a conocer que cuando se le consultó, respondió que tenía bastantes tareas en Concepción, pero que a pesar que sería una preocupación siempre está dispuesto al servicio del Señor y de la Iglesia. “Yo creo que en le medida que se pueda prestar un servicio a la Iglesia Latinoamericana, en el ámbito de la cultura y de la educación, creo que es importante ofrecerlo”, afirmó.
Monseñor comentó que este servicio suyo de alguna manera representa un servicio de Iglesia de Concepción, que se hace presente con su obispo, en esta tarea. En este sentido, manifestó su confianza en el Papa Benedicto XV. “Espero que el Santo Padre me dé una ayuda como para no dejar descuidada la Iglesia de Concepción, por tratarse de un servicio a las iglesias hermanas de América Latina”, precisó.
El arzobispo dijo que este nombramiento significa tener presente todo el gran ámbito de la tarea pastoral de la Iglesia de América Latina, que se refiere al tema cultural y educacional. “Creo que tiene una importancia muy grande, por cuanto la tarea evangelizadora de la iglesia está íntimamente relacionada con la cultura”. Agregó que se trata que la evangelización sea eficaz y que el evangelio, la persona el mensaje del Señor penetren en la cultura de tal manera que sea también, fuente de vida nueva y por consiguiente, de una cultura nueva, una cultura más centrada en la persona de acuerdo al proyecto que Dios tiene sobre las personas. “Se trata de una cultura más centrada en la sociedad, pero en la sociedad pensada y querida por Dios, para que los hombres de América Latina, como lo dice la V Conferencia, tengan en El, vida abundante”, concluyó.
