El lunes 19 de marzo fue presentado, en el Pontificio Instituto Bíblico de Roma, “El Evangelio según Judas”, obra destinada a suscitar un gran interés entre los expertos, el público apasionado de literatura religiosa y el público en general.
Fruto de la imaginación de un romancero británico, Jeffrey Archer de Londres, el “El evangelio según Judas”, ha sido escrita en colaboración con el padre Francis Moloney, Inspector de Australia y estudioso de Sagrada Escritura. El mismo Archer define al libro como “¡no sólo una novela!”.
Moloney, considerado por el mismo Cardenal Carlo María Martini como un “estudiante brillante”, ha explicado a ANS cómo nació la obra. A propuesta de Archer el estudioso australiano había redactado un evangelio esencial utilizando los textos sinópticos y enriqueciéndolo con los escritos de San Juan; Archer ha desarrollado, posteriormente, la historia haciéndola fascinante y dinámica. El resultado, según los críticos, es una maravillosa historia que se inserta en la larga tradición cristiana de las biografías de Jesús.
El libro está publicado por Macmillan (UK), por St Martin’s Press (USA), y por Mondadori (Italia) en ocho lenguas: inglés, italiano, polaco, holandés, español, francés, alemán y portugués. Las numerosas citas bíblicas, de las que está dotado el volumen, han sido traducidas directamente de los textos originales por don Moloney autor de varias obras – nada menos que 36 títulos – sobre temas bíblicos y comentarios al Evangelio de Juan, Marcos y Lucas.
Para Moloney “El evangelio según Judas” será un instrumento muy útil para la vida de los lectores cristianos que tienen un conocimiento superficial de los Evangelios y que se relacionan con ellos como si fueran textos históricos maternos.
El mismo Moloney ha sugerido a Archer la idea de encomendar la firma del libro a un hipotético hijo de Judas, Benjamín Iscariote, para no caer en el género de la autobiografía del apóstol.
“El evangelio según Judas”, que tiene como marco histórico la comunidad cristiana de los primeros orígenes, ha sido definido por el mismo Archer como “¡un evangelio y no una breve narración o una novela!”.
