El Santo Padre Benedicto XVI nombró Obispo de Civitavecchia-Tarquinia en Italia al sacerdote salesiano Carlo Chenis, hasta ahora Secretario de la Comisión Pontificia para los Bienes Culturales de la Iglesia.
Reseña biográfica
El padre Chenis nació en Turín el 20 de abril de 1954. Profesó en la Congregación Salesiana el 28 de septiembre de 1971 después de haber hecho el noviciado en Pinerolo. Fue ordenado sacerdote el 26 de mayo de 1984, en Cuorgné (Turín) después de haber conseguido la licencia en filosofía y realizado los estudios teológicos en la Universidad Pontificia Salesiana (1976-1983).
En 1989 se licenció en Letras en la Universidad Estatal de Turín. Joven sacerdote, desde 1984 al 1995, fue profesor en la Universidad Pontificia Salesiana, ocupando también el cargo de miembro del Consejo de Administración desde 1989 a 1995. Inició desde 1985 la capellanía universitaria de la UPS entrando en diálogo con otras instituciones pastorales universitarias de Roma.
Ha ocupado distintos cargos dentro de la Universidad, tanto en lo académico como en la vida religiosa. Ha realizado un servicio pastoral como ayudante-capellán y director espiritual de Congregaciones de Hermanas, además ha colaborado en parroquias, donde ha trabajado varios años en el centro juvenil de Ponte Mammolo, y en Cerdeña donde ha llevado adelante varios proyectos de animación pastoral. En su docencia, además de la enseñanza en la UPS, ha enseñado programas de master de arquitectura y bienes culturales en distintas Universidades Civiles de Italia.
Tiene en su activo más de 500 artículos tanto respecto a las disciplinas enseñadas como de la vida espiritual. Es solicitado para numerosas consultas en el sector de los bienes culturales por las autoridades institucionales civiles. Desde julio de 1995 es Secretario de la Pontificia Comisión para los Bienes Culturales de la Iglesia y desde 1904 es Miembro de la Pontificia Comisión de Arqueología Sagrada. Durante el quinquenio de preparación al Jubileo fue coordinador de la Comisión Artístico-cultural y fue Vice-Presidente de la Fundación para los Bienes Artísticos y Culturales de la Iglesia.
