Un nutrido programa de actividades permitió vivir a fondo un nuevo aniversario de la Parroquia Nuestra Señora de la Paz de Alto Hospicio desde el 25 de junio al 2 de julio, abarcando los diversos aspectos que contempla toda celebración salesiana; religioso, recreativo, cultural, familiar.
Los antecedentes para el establecimiento de la parroquia datan desde el 11 de junio de 1985, el entonces obispo iquiqueño, Mons. Enrique Troncoso, firmó el decreto con el cual elevó a la categoría de Parroquia la Capilla Nuestra Señora de la Paz de Alto Hospicio, desmembrando su territorio de las parroquias San José de Pozo Almonte y Santísimo Redentor de Huara.
Programa deportivo
Se comenzó el domingo 25 de junio con un campeonato deportivo, donde niños, jóvenes y adultos de las diferentes Comunidades de Base de la parroquia, además de luchar denodadamente por el título, pudieron vivir los valores que semana a semana se les inculca en la parroquia: alegría, compañerismo, fe, responsabilidad. Esta actividad terminó el lunes 26, habiendo alcanzado en plenitud los fines propuestos. Unas 400 personas, entre niños, jóvenes y adultos, participaron en esta actividad que se desarrolló en las canchas del Colegio Domingo Savio aledaño a la parroquia.
Cena de fraternidad
En la noche del mismo domingo 25 se realizó una Cena de Gala, para vivir la fraternidad parroquial. Cien hermanos parroquianos adquirieron su adhesión y pudieron vivir una Cena simpática, elegante, donde se compartió en profundidad, en un ambiente alegre y fraternal. La Cena, servida por la Empresa banquetera contratada, terminó con un baile familiar, el que se prolongó hasta altas horas de la madrugada del lunes, día feriado.
Velada artístico-cultural
El programa siguió con una velada preparada por los niños de Catequesis Familiar realizada el sábado primero de julio. Dirigidos por sus ACN, los niños representaron la llegada del Evangelio a las diferentes zonas del territorio nacional. Lo hicieron a través de expresiones artísticas como danza, baile, poesías, canto, dramatizaciones. Simpáticos los cantos, los bailes y la diabladas de la zona Norte, que narraban la historia de la Ñusta Tirana. Llamativos los ritmos pascuenses; siempre interesantes las historias de los cuasimodistas del Centro de Chile; emotivos los relatos de las devociones chilotas; misteriosos los cuentos del extremo austral. Fue una actividad muy simpática, en la que los niños demostraron una faceta muy interesante.
La celebración eucarística
El domingo 2 de julio se celebró la Solemne Eucaristía de Aniversario. Se realizó en los patios de la parroquia, adornados para la ocasión, presidida por el Padre Sean O´Konnors Vickers, columbano, primer párroco de la nueva parroquia. Expresamente se quiso que fuera él quien presidiera la celebración, como homenaje a la Sociedad Misionera de San Columbano, institución fundadora de la Iglesia en Alto Hospicio.
La Eucaristía resultó solemne, muy participada. En ella, los niños de la catequesis, sus catequistas y sus padres, tuvieron una participación especial, sobretodo en relación a la beata adolescente chilena Laura Vicuña.
Laura Vicuña, patrona de la catequesis familiar de la parroquia
Después de un tiempo previo de preparación, especialmente durante los meses de mayo y junio, en que los catequistas y los niños conocieron a Laura Vicuña, su drama familiar, su participación en la catequesis de Primera Comunión de donde brotó su heroico gesto de donación de su vida para salvar a su madre, se decidió hacer un acto trascendental, señero, tal vez el primero en las parroquias de Chile: declarar a Laura Vicuña como modelo y patrona de la catequesis familiar de la Parroquia Nuestra Señora de la Paz. Y para dar más solemnidad al este acto se escogió hacerlo en la celebración aniversaria de la parroquia. Y así lo hizo el Párroco Juan Carlos Favaretto, en uno de los momentos más solemnes de la Misa como es la postcomunión.
Al final de la celebración eucarística se bendijo e inauguró un hermoso monumento a Laura Vicuña, cuya estatua fue donada por la Fundación Laura Vicuña de Chile. Los catequistas y los parroquianos en general se sentían orgullosos por el hecho de hacer resaltar ante la comunidad católica esta faceta de la espiritualidad de Laura Vicuña.
Retiro espiritual para los miembros de los bailes religiosos
En la tarde de ese mismo día domingo, se realizó una tarde de espiritualidad para los miembros de algunos bailes religiosos, la que fue dirigida y predicada por los misioneros parroquiales. La finalidad fue reforzar su fe antes de iniciar la tradicional romería al Santuario de La Tirana, donde durante unos diez días se dedican a cantar y bailar a la Reina del Tamarugal, Madre del Señor. La Eucaristía fue celebrada por el Párroco, después de la cual los Bailes hicieron su despedida pidiendo la bendición del Señor para su importante peregrinación mariana.