Arica, 4 julio 2005.
El Obispo de Arica, el salesiano monseñor Héctor Vargas Bastidas celebró este sábado, 25 años de sacerdocio en compañía de los fieles, familiares, sacerdotes, y tres obispos de Perú. Durante los festejos, Mons. Vargas publicó una carta diocesana con motivo del sínodo diocesano.
Las actividades de festejo por las “bodas de plata” sacerdotales del Obispo de Arica comenzaron el viernes 1 de julio con la bendición de la capilla “María Auxiliadora” de Cuya. El mismo viernes, a las 20:00 hrs. el Obispo Vargas dio a conocer en el Teatro Municipal de Arica su Carta Pastoral “Juntos Construimos Iglesia”, referida al Sínodo Diocesano convocado por el Pastor y que solemnemente inaugurado hace algunos días con la presencia del Nuncio Apostólico de Su Santidad.
La celebración central se desarrolló el sábado 2 de julio, en la Catedral de Arica, con una Eucaristía en la que participaron Mons. José Hugo Garaycoa Hawkins, obispo de Tacna y Moquegua; Mons. Marco Antonio Cortez Lara, obispo coadjutor de Tacna y Moquegua; Mons. Adriano Tomasi Travaglia, obispo auxiliar de Lima, el administrador diocesano de Iquique, Mons. Marco Órdenes; el provincial salesiano, padre Bernardo Bastres, religiosos de esa Congregación, venidos de Iquique y Santiago, autoridades y fieles de la diferentes comunidades y movimientos de la diócesis.
En su homilía, Mons. Vargas entregó su testimonio de vida, desde su enseñaza primaria, donde comenzó su deseo de participar de la vida religiosa, hasta la elección que de él hizo el Papa Juan Pablo II como Obispo de Arica.
Mons. Vargas pidió también perdón por las eventuales fallas cometidas en estos 25 años, y renovó junto a la comunidad su compromiso a María Auxiliadora.