Comunicado referido al Fallecimiento de S.S. el Papa Juan Pablo II

Santiago de Chile, 2 de abril de 2005. 17:31 hrs. (21:31 utc)
Hace algunos instantes fue comunicado al pueblo de Roma y al Mundo la muerte de Su Santidad, el Papa Juan Pablo II, Sumo Pontífice Romano, sucesor de Pedro, Vicario de Cristo, Pastor de la Iglesia Universal en la tierra y Superior Supremo de la Sociedad Salesiana.

La Congregación Salesiana en Chile se adhiere al sentir universal por la muerte del Papa Juan Pablo II, y agradece a Dios su testimonio cristiano y su ministerio de Pastor Universal de la Iglesia.

Su profunda sensibilidad por el ser humano y su constante predicación de la paz, la libertad, la unidad de los cristianos, la defensa de la vida y los derechos humanos, constituyen un legado para todos y en especial para las generaciones futuras.

Su esfuerzo por llegar a todos los rincones de la tierra con la Palabra de Jesucristo, alienta el espíritu misionero de la Iglesia y de todos los fieles cristianos. Su especial simpatía y sintonía con la juventud, manifestada en las jornadas y encuentros mundiales con los jóvenes, estimulan la misión de la Familia Salesiana en el corazón de la Iglesia, al estilo de San Juan Bosco, Padre y Maestro de la Juventud, a quien el mismo Pontífice dedicó un Mensaje bajo ese título, con ocasión del centenario de su muerte.

Al inicio del Vigésimo Quinto Capítulo General de la Congregación, el Papa Juan Pablo Segundo llamó a los salesianos a buscar la Santidad, como el ”deber esencial de la vida cristiana”, y que quiso ejemplarizar, para los fieles, en la Beatificación de Laura Vicuña, y en tantos hermanos y hermanas de la Familia Salesiana, llevados a los altares.

La Congregación Salesiana se une a la oración de toda la Iglesia, en sufragio por Su Santidad el Papa, y lo encomienda a la intercesión de la Santísima Virgen María, Auxilio de los Cristianos y a la de Todos los Santos.