Santiago, 28 diciembre 2004.
“Soy partidario de sacar el sistema educacional de las municipalidades, sacarlo radicalmente, porque no están en condiciones de gestionar el sistema”. Así lo señaló el senador Rafael Moreno, presidente de la Comisión de Educación de la Cámara Alta, quien agregó que la desigualdad que ha provocado el Sistema Municipalizado es la generadora de los desequilibrios que se traducen por ejemplo, en que un número importante de estudiantes que ingresan por primera vez a una institución de educación superior, tengan importantes deficiencias , por ejemplo en el área de la comunicación, tanto escrita como oral.
Así lo indicó el parlamentario en el Foro Proyecto de Ley que Establece Normas para Financiamiento de Estudios de Educación Superior”, organizado por la Universidad Católica Silva Henríquez, que además contó con la presencia de la jefa de la División de Educación Superior del Ministerio de Educación, Pilar Armanet; del rector de esta Casa de Estudios, Sergio Torres; y de la presidenta de la Federación de Estudiantes de la UCSH, María Isabel Moya. El encuentro fue moderado por el periodista Alejandro Guillier.
En la oportunidad, el senador Moreno responsabilizó al sistema educacional actualmente existente de las deficiencias con que muchos de los jóvenes llegan a la educación superior, lo cual queda de manifiesto con los resultados que arrojó la prueba TIMSS, que por estos días se han convertido en una no muy buena noticia para el país.
Boomerang
El parlamentario hizo una fuerte autocrítica en cuanto a la responsabilidad que le cabe a las autoridades en la toma de medidas para mejorar lo existente. “Pero nos equivocamos”, afirmó Moreno, y agregó que muestra de ello es la Ley de Jornada Escolar Completa (JEC), que según el senador se está convirtiendo en un verdadero boomerang.
“Para introducir equidad dentro de la JEC, obligamos a que los institutos y establecimientos privados subvencionados que reciben dineros del Estado, recojan el 15% de alumnos y alumnas que no están en situación económica de pagar. A modo de ejemplo, en la zona que yo represento (la VI Región), las instituciones privadas subvencionadas están haciendo una campaña de marketing y ya tienen reclutada a la flor y nata del 15% de los mejores alumnos de las escuelas municipalizadas”, señaló.
Si bien reconoció que existen ciertas limitaciones por parte del sistema político, se debe apretar la mano con las herramientas de las que se dispone. “Aquí hay una disputa ideológica que algunos han convertido en una especie de fetiche, que si uno hace que el Estado intervenga más, en el fondo está lesionando la libertad de la educación. Hoy la libertad de la educación está en la medida que se puede pagar para entrar. El tema está en darles la posibilidad real de escoger libremente donde ir”.
En este sentido, el senador criticó al Consejo Superior de Educación ya que a su juicio la entidad “ha sido un colador sin malla. Pasaron todos”. Añadió que el riesgo de la autonomía, sin mayor regulación, ha quedado de manifiesto con lo sucedido en algunas entidades que, una vez lograda, “hace lo que se le ocurre, porque es autónomo. En consecuencia, puede hasta estafar”.
“No hay que excusarse en decir que le den un buen instrumento para operar al enfermo. No, al enfermo, si tengo el diagnóstico claro, lo opero aunque sea a mano y con el cuchillo de cocina. Eso es lo que en estos momentos hay que hacer”.
Moreno reafirmó su compromiso por hacer exigible la acreditación a las instituciones de Educación Superior, y señaló que aquí se deben tomar decisiones ya que “cuando hay un diagnóstico de que la cosa hay que modificarla, aunque hayan muros muy grandes, al final se caen”.
