Presidente latinoamericano de comunidades terapéuticas visita Programa Don Bosco

Santiago, 12 octubre 2004.
El padre Gabriel Mejías, sacerdote terciario capuchino y presidente latinoamericano de comunidades terapéuticas, visitó el Programa Don Bosco, durante la jornada de reflexión de la realidad juvenil que se realizó ayer en el Centro Juvenil Don Bosco, de Lo Cañas.

Hace 10 años que conoce a Chile en el ámbito de las comunidades terapéuticas, cuando colaboró en la gestación de la Federación Chilena. Se educó con los salesianos y habla con cariño de la experiencia de Don Bosco de la que destacó especialmente la mirada positiva de los juventud.

Su experiencia en la rehabilitación lo lleva a afirmar con seguridad que “lo escencial en la comundad terpaétuica es el amor. El muchacho no es un problema. Gabriela Mistral decía que si no amas, no eduques. Si el edudor ama al muchacho, tiene un poder inmenso para ayudarlo a realizar un proyecto de vida. Tiene la posibilidad para que grupos de muchachos pandilleros, violentos, con dificultad de conducta realmente se acoplen a un proyecto de vida nuevo, a un proyecto que tenga espiritualidad y valores”, manifestó. El padre Mejías recordó que de niño pudo compartir con los salesianos y que “Don Bosco parte de un concepto sobre el valor del niño y del adolescente y las posibilidades infinitas que tiene un joven para trabajar. El muchacho no es un problema. Nuestros gobiernos le ponen atención a los jóvenes sólo cuando son un problema”.

El Programa Don Bosco realizó ayer un encuentro de su área de rehabilitación en la que reunió a cerca de 150 residentes para motivar una mirada de los jóvenes. Durante la mañana contaron con la visita y el saludo del padre Bernardo Bastres, superior provincial de los salesianos en Chile. Luego, realizaron un trabajo conducido por Alejandra Castro que reflexionó acerca de la realidad juvenil a partir de las últimas informaciones de prensa.Alejandra Castro señaló que los jóvenes residentes del programa “se perciben marginados incluso en su propia familia. Hay harta discriminación y harto prejuicio, están estigmatizados con la sociedad”.

Antonio Ovando generar un espacio de acercamiento a la figura de Don Bosco como modelo de vida. Un espacio para que los jóvenes puedad reflexionar acerca de lo que pasa con los jóvenes.

Hemos estado preocupado por la temática juvenil. Más allá de la falta de oportunidades, el tema pasa por los ambientes.

La actividad contó con una amplia cobertura de los medios de comunicación. El padre Mejías se encuentra en Chile, invitado por la Asociación Chilena de Comunidades Terapéuticas, cuyo presidente, Mario Ríos , explicó que la primera comunidad visitada era el Programa Don Bosco, debido “a todo el trabajo que están realizando y por la muy buena comunicación con uno de los miembros del directorio, Antonio Ovando”.