Puerto Montt, 16 septiembre 2004.
El domingo 12 de agosto, 25 jóvenes que trabajan en la preparación de los niños a la primera comunión han reflexionado en profundidad su vocación, en un retiro que tuvo como motivación las palabras del profeta Jeremías: “Mira, Señor, que no soy más que un niño que no sabe hablar”.
En esta reflexión los acompañaron el salesiano Erick Oñate, y el párroco, Padre Héctor Flores. Ellos expusieron las exigencias que conlleva el ser un anunciador de la Palabra de Dios.
El retiro se inició a las 09:00 y finalizó a las 18:00 horas. Al concluir, los jóvenes manifestaron que el retiro les ayudó a darse cuenta, que su aporte es fundamental en la evangelización de los niños, y por tanto deben ser responsables y dar un buen testimonio. Se concluyó la jornada de reflexión con la Eucaristía, que fue presidida por el Padre Héctor Flores.
